La impugnación del sustituto de Lesmes abre otro cisma en el Poder Judicial
Un vocal conservador, Wenceslao Olea, ya aventuró el pasado jueves el recurso contra el juez
El foco de la crisis institucional en el Poder Judicial proyectaba sobre la negociación reabierta por PSOE y PP para renovar el órgano de gobierno de los jueces, que lleva casi cuatro años en funciones. Sin embargo, un nuevo cisma en la cúpula de la judicatura amenaza con desviar la atención del bloqueo político y tensar las relaciones entre el Tribunal Supremo y el CGPJ.
El motivo ha sido el recurso presentado este lunes por un vocal contra el nombramiento del sustituto temporal de Carlos Lesmes al frente del Consejo, el consejero Rafael Mozo. Una designación que considera fuera de la ley e individualmente reprochable.
La iniciativa de impugnar este acuerdo del pleno ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Supremo parte de Wenceslao Olea, vocal conservador y compañero de Lesmes en la misma Sala Tercera del Supremo que verá el recurso. Entre sus peticiones incluye la aplicación de una medida cautelarísima para que el tribunal decida en un margen de 48 horas —hasta este miércoles— si suspende el nombramiento de Mozo hasta que se resuelva el fondo de la cuestión.
Olea, consejero procedente del turno de magistrados con mejor escalafón en el Consejo, ya aventuró el pasado jueves el recurso presentado este lunes en el Supremo. Lo hizo en el voto particular que presentó tras el acuerdo del pleno para elegir a Rafael Mozo. Fueron 16 votos contra uno, el de Olea, que se quedó solo en el respaldo del informe técnico pedido por Lesmes antes de dimitir. Dicho documento entregaba de forma automática la presidencia del alto tribunal y del CGPJ al vicepresidente en funciones del Supremo, Francisco Marín Castán, al tratarse de un cargo «conjunto e indisociable», según la Ley Orgánica del Poder Judicial. Pero los vocales del Consejo fueron a piñón en contra de estas conclusiones, que consideraron una imposición, y replicaron con argumentos jurídicos la elección de Mozo, el vocal con mayor antigüedad del actual órgano. En suma, las buenas palabras de uno de los comunicados difundidos por el Consejo el pasado jueves, cuando agradeció la labor de Lesmes en la presidencia en todo estos años, se quedaron en papel mojado ante el incipiente conflicto que suponía dar la espalda a las conclusiones del Gabinete Técnico del Supremo y, sobre todo, al apoyo dado por la Sala de Gobierno del alto tribunal, integrada por los presidentes de todas las salas.