10 horas de agonía. Cronología de los hechos
Alicia, la mujer que a primera hora de este jueves ha encontrado en el felpudo de su puerta en su domicilio de Santutxu al bebé secuestrado anoche del Hospital de Basurto en Bilbao ha explicado que "enseguida ha caído" en que era el recién nacido raptado y se ha alegrado de que el robo ha tenido "un final feliz para los padres y para todos".
Según ha relatado la mujer a Europa Press, a las 8.05 horas ha sonado el timbre de la puerta de su vivienda, ha mirado por la mirilla, pero no ha visto a nadie, y ha abierto para encontrarse en su felpudo a "un crío, que enseguida he caído que era el secuestrado". Ahí terminaba la pesadilla que durante algunas horas ha mantenido en vilo a los padres.
Fue la madre la que dio la voz de alarma ante la tardanza de la supuesta sanitaria, cuando este miércoles, sobre las nueve de la noche, el personal del hospital comenzó a buscar por todas partes a la presunta secuestradora y al bebé, de apenas un día de vida. La rápida actuación de la Ertzaintza y la Policía Local de Bilbao ha permitido que esta angustiosa historia tenga un final feliz: con el bebé de nuevo en brazos de sus padres y la secuestradora detenida.
El dispositivo de búsqueda rápidamente identificó a la mujer, de 24 años de edad, tras rastrear las imágenes captadas por las cámaras de seguridad, que mostraban a la sospechosa, de aproximadamente 1,60 metros de altura y complexión obesa, saliendo del hospital por la puerta de Capuchinos, próxima a Termibus, con bata blanca y una bolsa en la mano.
Posteriormente, otras cámaras de vigilancia captaron a la raptora ya cambiada de ropa y con el bebé en brazos caminando por la calle. El consejo de Seguridad del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, indicó minutos antes de conocerse la detención de la mujer que esta había pasado la noche moviéndose "intensamente" por Bilbao, "en una y otra dirección". Según apuntó TVE, la mujer habría realizado una parada en una farmacia para comprar leche materna.
Poco antes de las siete de la mañana, la Ertzaintza emitió una nota en la que solicitaba la colaboración ciudadana para localizar tanto al bebé como a la supuesta raptora. La ayuda de los vecinos fue "muy positiva", declaró Erkoreka. De hecho, fueron un joven y su madre quienes, sobre las 8.00 horas de la mañana, avisaban a los agentes de que alguien había llamado a su puerta y había huido dejando en el felpudo al pequeño.
Un timbrazo sin nadie al otro lado de la mirilla que nunca olvidarán. "¡Que ha aparecido el bebé!", exclamó Alicia a su hijo, que se calzó y bajó corriendo a la calle para intentar encontrar a la mujer o alguien que le pudiera aportar alguna pista. Ambos has constatado que el pequeño se encontraba "perfecto y le acababan de dar la leche". Hasta la llegada de la policía y de los sanitarios, el niño estuvo con la mujer en el sofá "tranquilo, casi dormido" en esta vivienda del octavo piso de un edificio de la plaza del Carmen, en el barrio bilbaíno de Santutxu.
La Ertzaintza tardó "un minuto" en presentarse. Desde allí fue trasladado de vuelta en ambulancia al Hospital de Basurto, donde su aparente buen estado de salud fue corroborado tras los pertinentes controles médicos. Según recoge El Correo, el bebé fue devuelto a sus padres, una pareja de treintañeros de Durango, sano y salvo y "envuelto en una toalla, sin pañal", pero "sin un solo rasguño".
La consejera de Salud, Gotzone Sagardui, quiso dirigir unas palabras a la familia: "No me imagino por lo que están pasando y quisiera transmitirles todo el calor del equipo de Osakidetza que les ha acompañado en todo momento. Además, les seguiremos ofreciendo todo nuestro apoyo".
Se desconoce el móvil
Sobre las 10.45 horas, la presunta raptora fue localizada y detenida en la plaza Azoka del barrio de Zorrotza de la capital vizcaína, donde se encontraba con una amiga "en estado de agitación". La mujer fue trasladada a la comisaría de la Ertzaintza de Deusto, donde permanece. Tras el arresto, efectivos policiales acudieron al domicilio de la mujer, en el barrio de Santutxu, para efectuar el registro de ese piso.
De momento, se desconoce el móvil del secuestro, pero la joven había comentado a algunos vecinos que estaba embarazada y que ya había comprado ropa y silla. De hecho, había asegurado que tenía que dar a luz esta misma semana, explica una mujer del barrio, que afirma que la autora del rapto es "una buena chavala" con la que mantenía relación, al igual que con su familia. "No habría llegado a imaginar nunca que ha hecho lo que ha hecho, llevarse a un bebé de un hospital", ha añadido.
"Nos hemos quedado todos alucinados. Si es mentira o no que estaba embarazada, no te puedo decir, pero la abuela nos dijo que iba a ser una niña y que le tocaba para este mes", ha comentado la mujer, mientras se pregunta "qué le ha podido pasar por la cabeza" y si ha podido perder su bebé. En su opinión, la detenida "se ha visto acorralada" porque los vecinos habían difundido la noticia a través de las redes sociales y por WhatsApp.
El consejero de Seguridad del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, matizó sus afirmaciones iniciales sobre los "varios intentos de secuestro" de bebés que habría realizado la detenida y aseguró posteriormente que esta es una cuestión aún por confirmar y que deberá aclararse en la investigación.
Antes de la detención de la mujer, Erkoreka afirmó ante los medios que la sospechosa habría tenido varios intentos frustrados de raptar a un bebé esa misma noche en el mismo centro hospitalario. Sin embargo, una vez producido el arresto, puntualizó: "No he dicho que haya intentos de secuestro, he dicho que la mujer se ha movido por el hospital y que ha abierto algunas puertas de algunas habitaciones".
"Lo que quiero decir es solamente que no hay constancia de que fuera deliberada y exclusivamente en busca de ese niño, que probablemente hizo otros intentos de localizar, identificar o contactar con otros bebés", añadió.
El protocolo, a revisión
En cuanto a lo sucedido, la consejera ha asegurado que se trata de un hecho "aislado" que todo el equipo de maternidad de Basurto y el equipo directivo del Hospital, como la Dirección de Osakidetza están "analizando exhaustivamente".
Según un comunicado difundido por el Gobierno vasco, "Hoy mismo [por este jueves] se va a convocar el equipo corporativo de seguridad del paciente, como en cada ocasión que ocurre un incidente de seguridad". "Corresponde a este órgano realizar las propuestas de mejora de los protocolos existentes", ha indicado la consejera en dicha nota.
"Se deben entender las circunstancias de una madre a las pocas horas de dar a la luz a nivel físico y emocional. Esperamos para ver qué es lo que ha ocurrido y buscar mejoras, si hay que adoptarlas", ha agregado Sagardui.
El protocolo que consta en la página web de Osakidetza referido a partos, y fechado en 2014, indica que "todos los cuidados, exploraciones y pruebas del recién nacido se deben hacer a pie de cama para no separar a los progenitores del bebé. Cuando no sea posible se solicita a los progenitores o un familiar que acompañe al profesional en el traslado del recién nacido".
Antecedentes
Este secuestro tiene precedentes en Euskadi. En 2012, cuando una mujer con problemas mentales raptó a una bebé en el Hospital Donostia aunque fue localizada una hora después con la niña en perfecto estado. También en 2014, cuando se produjo un intento de robo de un niño en el mismo centro hospitalario.
Tras el primer caso, se revisaron y reforzaron los protocolos del Servicio Vasco de Salud, de forma que a partir de entonces la prueba del talón y la hipoacústica se realizan en la habitación.
Tras conocerse estos hechos, la organización privada Defensor del Paciente ha pedido a la Fiscalía que investigue este caso, "que ha puesto de manifiesto la falta de seguridad de los hospitales públicos", ya que es posible que "alguien pueda coger material del hospital sin que nadie lo evite y, aún más, llevarse a un recién nacido"