Los letrados siguen la huelga y Justicia les acusa de «elevar» sus exigencias
La primera reunión acentuó las diferencias entre las partes tras 15 horas de negociación
Sin acuerdo tras 15 horas de reunión y, lo peor de todo, es que las posturas entre el ministerio y los Letrados de la Administración de Justicia (LAJs)parecen tan alejadas que la huelga indefinida tiene visos de prolongarse tras 18 «caóticas» jornadas para todos los usuarios del servicio público judicial.
Ni el «desolador» panorama que está provocando este paro —más de 156.000 vistas y juicios suspendidos en todo el país y unos 560 millones de euros paralizados en la cuenta de consignaciones judiciales— ni los llamamientos al «desbloqueo» de los gobiernos y parlamentos de las Comunidades Autónomas han servido de acicate para sacar un mínimo principio de acuerdo en la mesa de negociación. Nada.
Desde el departamento de Pilar Llop han atribuido a la «cerrazón» del comité de huelga como el principal motivo del desencuentro. Incluso han revelado que los letrados judiciales «han elevado sus exigencias (sobre la subida salarial) respecto a las inicialmente planteadas y sin proponer ninguna otra alternativa».
Representados en la mesa por el secretario de Estado de Justicia, Antonio ‘Tontxu’ Rodríguez, número dos del ministerio, el gabinete de Llop ha culpado a los huelguistas de no querer «avanzar en el diálogo y la negociación» y plantear una nueva propuesta retributiva que «supondría una doble cláusula de enganche». Esto supone referenciar la cuantía de sus retribuciones a las de los jueces y magistrados, es decir, además de que cada letrado, individualmente, cobre el 85% de lo que perciben los jueces de sus respectivos órganos judiciales, el conjunto de la masa salarial estará también referenciada a la de la la carrera judicial, lo que en la práctica supondría «una doble subida salarial», explican desde Justicia en un comunicado.
El ministerio avanzó este viernes que ha propuesto estudiar una mejora de salario (la media actual es de 47.000 euros brutos al año) , pero basada en los grupos de población y en los destinos de los letrados, que beneficiaría especialmente a los LAJs con salarios más bajos. Una cuestión que los negociadores han rechazado. Para Justicia, la actitud de los letrados está siendo «insólita y contraria a cualquier lógica negociadora». «Cuando uno se sienta en una mesa de negociación debe partir de las demandas inicialmente planteadas y estar dispuesto a hacer alguna concesión», consideró el secretario de Estado. Antes de que concluyera la reunión, los LAJs afirmaron que no abandonarían la mesa de negociación «hasta no alcanzar un acuerdo que resuelva el conflicto» y se mostraron decididos a continuar la huelga indefinida. En una nota se explicó que desde Justicia no ha habido una oferta concreta y han tachado de «desconcertante» que desde las 24:00 horas se hayan sentado en la mesa de negociación, frente a frente, «sin entablar diálogo alguno». En suma, los dos representantes del ministerio en la negociación no han accedido por ahora a la pretensión de los huelguistas: el establecimiento de una cláusula de enganche que vincule las retribuciones del sector a la carrera judicial.