Qué piensa...

—¿A qué le gustaba jugar de pequeño?

—Andar con los amigos en las Eras de Renueva cuando no eran nada por las traseras de leche Ali. Yo vivía en Suero de Quiñones.

—¿Qué pondría en El Ejido?

—Una actividad en domingo tipo mercadillo en la calle José María Fernández.

—¿Es usted feminista?

—Absolutamente.

—¿Cómo lo demuestra?

—Mi equipo del Senado es mayoritariamente mujeres.

—¿Qué opina del permiso de paternidad?

—Es una fórmula que ayudará a las mujeres a igualarse en el trabajo a los hombres.

—¿A usted le habría cambiado la paternidad?

—No lo sé.

—¿En qué lugar de León se perdería?

—Como pueblo singular, en Arnado; pero también en Colinmas del Campo de Martín Moro Toledano, en Santa María del Monte de Cea o en Tejerina. El Páramo, los Payuelos, Los Oteros... desconocidos.

—¿Limpia su casa?

—Tengo pareja, pero vivo solo y lo hago yo todo.

—¿Cuál prefiere u odia?

—Ninguna en particular. Soy puntilloso y me gusta el orden.

—Un libro

—La trilogía de Harari.

—¿Cuáles son los siete apellidos leoneses?

—Llamazares, Llorente, Zambroncinos, Mencía, Lozano, Astorga, Marentes y, por supuesto, Prieto que significa negro.

—Qué proyecto prioritario para León llevaría al Senado?

—La resolución del bucle ferroviario del Manzanal con una vía moderna y rápida

—Su comida preferida.

—Muchas, pero destacaría la cecina entrecallada.