El PP sentará a Armengol por el caso Koldo en la comisión del Senado
El PSOE de Madrid se va a personar en la causa del novio de Ayuso por su «interés general»
La relación entre el PP y el PSOE entró hace ya tiempo en un punto de no retorno. Sin esperanza de llegar a grandes acuerdos -prueba de ello es el bloqueo que persiste todavía sobre el Consejo General del Poder Judicial-, ambos partidos vigilan de reojo quiénes conformarán la lista de comparecientes en las distintas comisiones de investigación sobre presuntas tramas de corrupción relacionadas con la compra de mascarillas durante la pandemia. Los populares están decididos a cobrarse la cabeza de Francina Armengol por el ‘caso Koldo’ y solicitarán su comparecencia en el Senado con la mira puesta en el presidente del Gobierno porque «lo sabía todo» y «lo tapó», mientras que los socialistas apuntan a Isabel Díaz Ayuso y a Alberto Núñez Feijóo para que den explicaciones en el Congreso por las adjudicaciones de sus gobiernos durante la crisis de la covid-19. Cada partido opta, de momento, por guardar sus cartas pero lo que parece claro es que la contienda política de las próximas semanas, con tres campañas electorales de fondo -las de los comicios vascos, catalanes y europeos-, se librará en los dos órganos parlamentarios, donde ambas formaciones tienen la intención de «aclarar lo qué pasó, caiga quien caiga». «Aunque el Gobierno no quiera y se rebele ante ello, y el PSOE se resista, todo se va a acabar sabiendo», auguraba este lunes el portavoz de los populares, Borja Sémper. «El objetivo es claro, aclarar lo que pasó, no jugar al ‘y tú más’», apuntaba, por su parte, la portavoz socialista, Esther Peña.
Aunque los conservadores no desvelan si la presidenta del Congreso inaugurará el desfile por la comisión de la Cámara alta, que se constituyó ayer y donde gracias a su mayoría absoluta manejan los tiempos, sí confirman que será de las primeras. En la cúpula del PP insisten en que Armengol no puede seguir como tercera autoridad del Estado ante las últimas informaciones que apuntan a un supuesto segundo intento de la trama corrupta de vender otro lote de mascarillas al Ejecutivo balear apenas dos semanas después de dotarles de cubrebocas de menor calidad a la contratada y si además se constata que hubo «interlocución directa» entre ella y Koldo García, el exasesor de José Luis Ábalos. «Está plenamente justificado que comparezca con la máxima urgencia para que explique cuál es su implicación», remarcó Sémper.
Según el principal partido de la oposición, la expresidenta balear debería haber puesto en conocimiento de la Fiscalía las llamadas que presuntamente recibió de miembros de «una trama que se forró con el negocio de las mascarillas en lo peor de la pandemia». «Que responda de su papel», reclamó el diputado vasco, que recordó también que el Parlamento de las islas someterá a investigación lo ocurrido. Será a partir del 9 de abril cuando comience sus trabajos una comisión específica. «Vamos a ir conociendo semana tras semana información del sumario», vaticinó Sémper. Los populares no cierran la puerta a incluir al jefe del Ejecutivo en la lista de comparecientes, aún por cerrar.
La trama de las mascarillas
El PSOE de Madrid ha decidido dar el paso y personarse como acusación popular en la causa que investiga a la pareja de Isabel Díaz Ayuso por dos delitos fiscales y uno de falsedad en documento mercantil. La formación liderada por Juan Lobato ha presentado un escrito en el Juzgado de Instrucción número 19 de la capital madrileña en el que justifica su acceso al sumario porque los hechos que se investigan son de «interés general» para los ciudadanos. Los socialistas madrileños esgrimen, además, que no hay necesidad de presentar una querella o una fianza debido a que los hechos tienen su origen, «en principio, en contrataciones relacionadas con el suministro de materiales sanitarios adquiridos durante la gestión de la crisis del Covid-19, y que, en cualquier caso, afectarían a los intereses generales como es un intento de defraudación a la Hacienda Pública».
Por ello, la formación solicita su personación en representación de sus afiliados y el interés general de la ciudadanía que preside la actuación de esta organización. Entiende que «este es el momento procesal oportuno para comparecer en el ejercicio de la acción popular» y justifica su presencia «por la preocupación y alarma social que producen a la sociedad este tipo de conductas».