Los imputados por Tsunami no se fían de la amnistía y huyen en estampida de España

El Gobierno y el PSOE insisten una y otra vez en que la amnistía a los investigados por el procés será una realidad y que nadie, ni siquiera los jueces con sus recursos ante Europa, podrá pararla. Pero los imputados en las causas por la intentona secesionista de 2017 no parecen estar tan seguros.

La desconfianza, en particular, se ha instalado en los acusados por terrorismo en los dos sumarios sobre las actividades de Tsunami Democràtic, la plataforma que lideró los graves incidentes en otoño de 2019 en protesta por la sentencia del procés. De los doce investigados por aquellos episodios tanto en la Audiencia Nacional como en el Supremo, a día de hoy solo cuatro siguen en España después de que en las últimas horas otros tres imputados hayan huido a Suiza, que parece haberse consolidado como ‘santuario’ por su negativa radical a entregar a los independentistas.

De los diez imputados en la Audiencia Nacional, según fuentes de la seguridad del Estado, al menos seis viven ya en el extranjero. Y los dos acusados por terrorismo en el Supremo por su aforamiento también están fuera: Carles Puigdemont está huido desde 2017 y acaba de instalarse en el sur de Francia; y el diputado catalán de ERC Rubén Wagensberg y número 9 de la lista de ERC en el 12-M se fugó la pasada Navidad a Suiza.

El miércoles anunció que se había marchado a vivir a Suiza el dirigente de Òminum Cultural Oleguer Serra ante la «persecución» del juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón. Este jueves hicieron idénticos anuncios el periodista Jesús Rodríguez y el empresario Josep Campmajó, quienes también han desvelado que acaban de fijar su residencia en aquel país para neutralizar el riesgo de que García-Castellón pueda acabar encarcelándoles.

Los anuncios de los tres tuvieron lugar solo horas después de que el martes García Castellón reclamara a los investigados de la causa que, a través de sus letrados, hicieran llegar en un día sus direcciones para poder citarles a declarar.

El propio abogado de Campmajó y Serra, Benet Salellas, en una entrevista con ACN, reconoció este jueves que la partida de sus clientes al extranjero es por las dudas de que la amnistía llegue a tener efecto. Salellas denunció que, pese a la tramitación de la ley de amnistía existe «cierto descontrol en determinados espacios» de la Justicia. Estas instancias judiciales, «están dispuestas a ir más allá de lo que dice la ley por motivos políticos». «Esta inseguridad hace tomar decisiones como el exilio», afirmó.

Rovira desde 2018

Más huidos

Pero los tres huidos de esta semana no son los únicos de ese sumario de la Audiencia Nacional. Desde 2018, antes del nacimiento de Tsunami, también reside en Suiza la principal encausada de este procedimiento, la secretaria general de ERC, Marta Rovira, a quien la Guardia Civil sitúa como promotora de las reuniones y encuentros durante 2019 en Ginebra en los que se alumbró el proyecto de la plataforma violenta que acabó promoviendo disturbios como la toma del aeropuerto de El Prat o el acoso a la Policía Nacional en Barcelona, que acabó con dos agentes heridos de gravedad. Además de Rovira y los tres huidos de esta semana, entre los imputados por García Castellón hay un banquero italiano que trabaja en el país helvético, Nicola Foglia, que, de acuerdo con los investigadores, sigue viviendo en Suiza, si bien su paradero exacto es desconocido.

El sexto imputado por García Castellón en Tsunami y que los servicios policiales creen que podría estar en el extranjero es el informático Jaume Cabaní, uno de los supuestos cerebros técnicos del próces y de la votación ilegal del 1 de octubre, persona muy cercana a Carles Puigemont y que en algunos periodos recientes ha vivido en Waterloo con el séquito del expresident.