España saca de Venezuela en avión militar al líder de la oposición a Maduro y le da asilo
La medida del Gobierno abre otro frente entre el Ejecutivo de Sánchez y el PP y le enfrenta a su socio de Sumar y a Podemos
El excandidato presidencial y abanderado de la mayor coalición opositora de Venezuela, Edmundo González Urrutia, llegó ayer a Madrid para pedir asilo en España, proceso que el Ministerio de Asuntos Exteriores ha adelantado que será «favorable». Después de despegar desde Caracas durante la madrugada española, el avión de la Fuerza Aérea Española en el que viajaba acompañado de su esposa y el secretario de Estado de Asuntos Exteriores y Globales, Diego Martínez Belío, hizo una escala en el aeropuerto portugués de Lajes, en la isla Terceira del archipiélago de las Azores. Poco después retomó el viaje, que finalizó sobre las 16:00 cuando aterrizó en la base Aérea de Torrejón de Ardoz, donde le esperaban la secretaría de Estado para Iberoamérica y el Español en el Mundo, Susana Sumelzo, y, en el acceso, una veintena de venezolanos residentes en España.
«A partir de ahora, comenzarán los trámites para la petición del asilo cuyo resolución será favorable en aras del compromiso de España con los derechos políticos y la integridad física de todos los venezolanos y venezolanas, especialmente de los líderes políticos», informó el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.
El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, había avanzado avanzó durante la madrugada que González Urrutia se encontraba de camino a España en un avión de la Fuerza Aérea española para obtener el asilo y que el opositor venezolano le había trasladado su agradecimiento.
Una vez aterrizado, Albares agradeció a todos los profesionales de su departamento y del Ministerio de Defensa que han hecho posible la llegada del excandidato presidencial.
«España está comprometida con la democracia y los derechos humanos en Venezuela», escribió en su cuenta de X.
Según Albares, el traslado de González Urrutia se llevó a cabo a petición suya tras pasar un tiempo en la residencia de la Embajada de España en Caracas. Su homólogo neerlandés, Caspar Veldkamp, informó a la Cámara de Representantes de los Países Bajos que el líder opositor venezolano también estuvo alojado en secreto en su embajada durante más de un mes.
La llegada de González Urrutia a España para pedir asilo ha generado reacciones tanto del PP, que se ha mostrado escéptico, y el PSOE, que ha pedido a los populares que reconozcan al Gobierno su trabajo durante la crisis venezolana. Y es que, según han considerado los socialistas en un mensaje publicado en la cuenta de X del partido, el PP, «pase lo que pase», siempre «va a la contra». Lo hizo en respuesta a sendos mensajes del vicesecretario de Institucional de los populares, Esteban González Pons, y de la diputada Cayetana Álvarez de Toledo, en los que han planteado dudas acerca de la conveniencia de la llegada del opositor venezolano.
Pedro Sánchez, y «los oficios corruptos» del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, escribió González Pons en su X, «deberían ser parcos en autoalabanzas». «Sacar a Edmundo González Urrutia SIN reconocerlo presidente legítimo NO es hacerle un favor a la democracia, sino quitarle un problema a la dictadura. Lo mismo haría Cuba si se le pide», criticó. En un mensaje posterior, el vicesecretario popular insinuó que el Gobierno español ha negociado con Nicolás Maduro para poder traer a España a González Urrutia.
«¿Cómo aterriza un avión del Ejercito español sin pacto con Maduro?. Técnicamente se llama autorización de sobrevuelo y aterrizaje, y al pedirla hay que especificar el propósito y los pasajeros que llegan y salen», dijo.
También se posicionó el líder de Vox, Santiago Abascal, quien acusó a Sánchez de presentar «su complicidad con Maduro como un acto humanitario» y de formar parte de un plan para que «el tirano» Maduro pueda «perpetuar su criminal régimen».
La líder de Podemos, Ione Belarra, reprochó al Gobierno la «prisa» que se ha dado para ofrecer asilo político al opositor venezolano Edmundo González, al que calificó de «ultraderechista», y criticó que, en casi un año, España no haya roto las relaciones diplomáticas con Israel por el conflicto de Gaza. Una crítica a la que también se ha sumado la eurodiputada y ‘número dos’ de la formación morada, Irene Montero, que ha asegurado que «para hacer lo que hace este Gobierno, ya está el PP».
Sumar cree que «es más necesario que nunca el inicio de conversaciones» entre las oposiciones venezolanas y el Gobierno «para acabar con la violencia y la represión, y asegurar el respeto a los derechos humanos y una salida democrática electoral acompañada internacionalmente».