La Xunta estudia reabrir la pesca en las Rías Bajas a principios de febrero

En cualquier caso, precisó que aún cuando las analíticas constaten el perfecto estado del pescado y marisco de las Rías Bajas, no se producirá la reapertura de los bancos sin consensuar previamente esta decisión con las cofradías. Además puntualizó que la reapertura de la actividad se hará en función de los resultados de los análisis de cada ría y no en toda la costa a la vez. Así por ejemplo explicó que las Islas Atlánticas tardarán más en recuperarse puesto que se ha constatado la presencia de fuel en los fondos marinos de este archipiélago. Además hizo hincapié en que aun cuando se apruebe la reapertura, los pescadores y mariscadores de la zona autorizada seguirán cobrando durante un tiempo las ayudas por cese de la actividad aprobadas por las administraciones central y autonómica. El objetivo de esta medida es proteger al sector mientras se recupera la confianza de los consumidores en los productos. Dos campañas Por otro lado, el Instituto Español de Oceanografía (IEO) del Ministerio de Ciencia y Tecnología tiene programadas dos campañas en aguas de Galicia, entre el 15 y el 22 de enero, para conocer los efectos del vertido del Prestige. La primera de ellas tiene como objetivos la estimación del impacto producido por el vertido en las comunidades de seres vivos de los fondos marinos de la plataforma continental de Galicia. Para ello se determinará la presencia y distribución del fuel en los fondos de la plataforma y además se comprobará si hay restos de fuel en los estómagos de las principales especies de fondo que viven en dicha plataforma continental. La segunda campaña tiene como objetivos el conocimiento del estado de las poblaciones de peces pelágicos (sardina, jurel, caballa, bacaladilla) y en su caso, de la determinación de la presencia de fuel entre aguas. Mientras, miembros de los colectivos ecologistas WWF-Adena, Adega y Greenpeace advirtieron del peligroso tratamiento que está recibiendo el fuel recogido en las playas gallegas por no estar siendo tratado como un fuel residual. Estas organizaciones aseguraron que el elevado contenido de azufre no se admite en ningún país de la UE y denunciaron que ya ha habido incineraciones del mismo y que seguramente «las volverá a haber». Mejoría del tiempo Por otra parte, en la jornada del lunes, por primera vez en días, pudieron continuar con su trabajo los voluntarios, cientos y ya no miles, que trabajan en los arenales y las rocas. También pudieron hacerse a la mar las embarcaciones que realizan las labores de control y vigilancia en las entradas de las rías gallegas, para confirmar que no hay nuevas manchas susceptibles de llegar a tierra. Regresan así a una actividad que ya se ha convertido en normal en los dos últimos meses, como lo es el traslado de contenedores repletos de chapapote que, por fin, se pudo hacer desde las Islas Ons hasta tierra firme. Sin salidas Dos meses después, a pesar del optimismo e imagen de normalidad que se intenta transmitir desde los gobiernos central y autonómico, los municipios afectados siguen sin ver salidas y las demandas cada vez son mayores. En la mayor parte de los ayuntamientos del reclaman del Gobierno central una actuación más allá de las ayudas económicas centradas en el mundo del mar y que, tal y como indicó el alcalde de Vigo, Lois Pérez Castrillo, permitan «saldar la deuda histórica que existe con Galicia desde hace años».