El mal tiempo impedirá desde hoy que salgan a faenar los buques que succionan el fuel vertido en el mar
El Gobierno vasco prevé una marea negra sobre la costa cantábrica
El Gobierno vasco cree que las costas de Euskadi y Cantabria sufrirán en los próximos días los efectos de una gran marea negra que teñirá de
Estos funestos augurios fueron dados a conocer en San Sebastián por el portavoz del Ejecutivo de Vitoria, Josu Jon Imaz, quien dio por seguro que esa «auténtica marea negra» de «cientos de toneladas de fuel» manchará las costas entre este domingo y el próximo miércoles ya que será imposible recoger del agua los cientos de galletas y bolas de alquitrán que navegan hacia tierra. Por ese motivo, Imaz insistió en que «todo aquello que no se pueda recoger hoy y que se encuentre por debajo del paralelo 44 terminará impactando sobre la costa cántabra y vasca en los próximos tres o cuatro días». Según los datos que maneja la comisión interdepartamental, la zona más afectada será la comprendida entre cabo Ajo, cabo Mayor y cabo Machichaco, así como las áreas que no estén al abrigo del viento del oeste. Los servicios de limpieza coordinados por dicha comisión trabajaron ayer a destajo en Vizcaya y Guipúzcoa. El portavoz del Gobierno vasco insistió en que, de momento, estos efectivos son suficientes, pero no descartó que, si sus temores se materializan, haya que recurrir también a la ayuda de voluntarios. Durante las últimas 24 horas, las malas condiciones meteorológicas dificultaron los trabajos de rastreo, vigilancia y recogida de chapapote en todo el Cantábrico. En la mar, los 140 barcos que salieron a retirar combustible tuvieron que enfrentarse a olas de más de tres metros y a vientos del norte de más de 60 kilómetros por hora. El mal tiempo también dificultó el despliegue de barreras anticontaminación.