León, entre las provincias donde más creció la tasa de criminalidad en el 2002
León es una de las provincias donde más ha crecido el número de delitos en el año pasado, aunque mantiene una tasa menor a la media nacional, que se sitúa en el 4,95 delitos por cada cien habitantes. Castilla y León es una de las seis comunidades autónomas donde más creció la tasa de criminalidad durante 2002, con 28,22 infracciones por cada mil habitantes, según los datos facilitados ayer por el Ministerio del Interior. El resto de comunidades en las que los índices delictivos han evolucionado de forma más desfavorable son País Vasco, Galicia, Baleares, Madrid y la Comunidad Valenciana. De este grupo de seis comunidades, las tres primeras, destaca Interior, tienen tasas de criminalidad inferiores a la media nacional (49,58 infracciones por cada mil habitantes), con valores del 28,22 por mil para Castilla y León, 29,21 para Galicia y 37,22 para el País Vasco. En las otras tres (Baleares, Madrid y la Comunidad Valenciana) las tasas crecieron respecto al año anterior y se sitúan, además, por encima de la media nacional. Por el contrario, las tasas de criminalidad descendieron en 2002 en ocho comunidades autónomas (Aragón, Asturias, Cantabria, Canarias, Murcia, Navarra, Cataluña y La Rioja) y en las ciudades de Ceuta y Melilla. Además, en las seis primeras comunidades mencionadas, en Ceuta y en Melilla también descendió el número total de infracciones contabilizadas en 2002 respecto a las de 2001. Según Interior, esos indicadores muestran que la evolución de la delincuencia es «claramente positiva» en ese grupo de comunidades. Según la información facilitada por Interior, que no incluye las cifras concretas de todas las CCAA, en las tres comunidades restantes (Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura) los índices de delincuencia (infracciones totales y tasa de criminalidad) crecen muy poco con respecto a 2001 por lo que puede afirmarse que «existe una estabilización en la criminalidad». Interior añade que de esas tres comunidades sólo Andalucía supera la tasa de criminalidad media española (50,19 frente a 49,58), mientras que la de Castilla-La Mancha es inferior (29,54) y la de Extremadura es la más baja de España (26,88 por mil). Por provincias el número de infracciones ha bajado en 14: Granada, Málaga, Zaragoza, Oviedo, Las Palmas, Santa Cruz de Tenerife, Santander, Guadalajara, Toledo, Palencia, Barcelona, Lérida, Guipúzcoa y Murcia, mientras que la tasa de criminalidad ha bajado en todas estas además de en Jaén, Valladolid y Logroño. Los índices de criminalidad han permanecido estables en 2002 en Almería, Sevilla, Cuenca, Salamanca, Zamora, Badajoz, La Coruña y Castellón. La información facilitada por Interior agrupa a las provincias en las que alguno de los indicadores ha crecido en 2002 por encima de la media aunque mantienen tasas de criminalidad menores a la nacional: Cádiz, Córdoba, Huesca, Teruel, Albacete, Ciudad Real, Avila, Burgos, León, Segovia, Soria, Alava, Vizcaya, Cáceres, Lugo y Orense. Finalmente, en Huelva, Baleares, Tarragona, Madrid, Alicante y Valencia los indicadores están por encima de la media.