Los catorce detenidos tenían órdenes de reactivar las estructuras de la banda en el País Vasco y Navarra
La policía desmantela una red de colaboradores de la dirección de ETA
La Policía Nacional golpeó ayer el vivero de los futuros pistoleros de ETA. Efectivos del cuerpo, en un operativo ordenado por el juez de la
Imagen de los integrantes del Pacto Antiterrorista antes de reunirse ayer en el Congreso
En el registro de una casa en la localidad gala de Tarbes utilizada por Susper, que días después se fugó de un calabozo de la comisaría, apareció un ordenador con archivos encriptados en los que el cabecilla etarra tenía los nombres (en forma de clave) de buena parte de los detenidos ayer, a los que Fernández Iradi, habría encargado el reclutamiento de posibles nuevos activistas con el fin de crear nuevos comandos y redes de informadores en todas las provincias de Euskadi y Navarra. Durante la primera fase del operativo policial, que se desarrolló entre la 1.00 y las 5.00 horas de la madrugada, fueron detenidas trece personas: cuatro en Guipúzcoa, tres en Vizcaya, dos en Álava y cuatro en Navarra. En la provincia guipuzcoana fueron arrestados, en San Sebastián Dolores Ganzarain Iztueta, de 19 años; Aiora Epelde Aguirre, de 25 años, y María Colera Intxausti, 30 años. José María Arruti Beristain, de 47 años, fue arrestado en la localidad de Régil. En Vizcaya, por su parte, los efectivos policiales capturaron a Mikel Jáuregui Aguirrezabala, de 38 años (Bilbao); Iñaki Ramos Añibarro, de 29 (Baracaldo), y José Lezama Markuartu, de 25 (Zalla). Los agentes detuvieron en la capital alavesa a Asier Ortiz de Guinea Íñiguez de Ziriano, de 22 años, y a Aiala Manrique Arbeo, de 23. De manera simultánea, los funcionarios arrestaron en Pamplona a Unai Redin Sánchez, de 22 años; Tomás Insausti Etxarri, de 25; Mikel Pardo Segovia, de 24, y Ainara Calvo Mugueta, de 18. A última hora de la mañana, la Policía Nacional culminó la operación con el arresto en Guipúzcoa de Arkaitz Rodríguez. No obstante, según fuentes judiciales, una mujer logró escapar al vasto dispositivo policial, ya que al parecer se encontraba en Francia. Otros 45 nombres La operación -durante la que se han llevado a cabo 18 registros en los que se ha incautado abundante documentación en soporte papel e informático- permanece totalmente abierta y los mandos policiales no descartan nuevas detenciones, dado que el listado descubierto a Susper incluía también otras 45 identidades de personas (nombres, alias o sólo iniciales) «susceptibles» de ser reclutadas como informadores e, incluso, como miembros de comandos. Sobre estos posibles aspirantes a activistas, la dirección de ETA tenía datos como su domicilio, simpatías políticas, familiares y conocimientos sobre materias útiles para la banda. Según fuentes de la investigación, el autor de estos listados sería el inmediato antecesor de Susper a la cabeza de los comandos terroristas, Juan Antonio Olarra Guridi,«Otsagi», detenido en septiembre del 2002. Los servicios de información de la policía investigan ahora si alguno de estos 45 jóvenes llegó a dar su «sí» a ETA y si entre los catorce detenidos dedicados a la captación hay algún colaborador que hubiera dado el salto a los grupos operativos. No obstante, la propia dirección de la banda terrorista había ya rechazado a algunos de los aspirantes propuestos por los captadores, por no considerarlos fiables, dadas sus relaciones familiares cercanas al mundo no nacionalista o su participación en manifestaciones convocadas por partidos democráticos. El ministro del Interior, Ángel Acebes, señaló que todavía se desconoce el grado de implicación de cada uno de los detenidos, no quiso aventurar si la banda armada ha logrado ya recomponer comandos operativos y estables en algunas provincias vascas.