Acebes afirma que el PNV acude en auxilio de ETA por su apoyo al diario
El caso Egunkaria ha desatado el mayor ataque verbal del Gobierno y del PP contra el Ejecutivo vasco y el PNV de los últimos meses. Varios ministros del gabinete de José María Aznar acusaron el martes al gabinete de Juan José Ibarretxe y al PNV de connivencia con la banda terrorista ETA y de interés por mantener la estrategia terrorista de «chantaje y coacción», por lo que afirmaron que ha llegado el momento de «desenmascararlos». El ministro del Interior, Ángel Acebes, dijo no entender cómo el Gobierno vasco puede mantener su intención de subvencionar a un periódico que «es un instrumento de una organización terrorista», algo «absolutamente incomprensible e indigno», por lo que considera que la actitud del Ejecutivo autónomo es «una afrenta al Estado de Derecho y que es necesario plantarle cara». El ministro dijo no explicarse por qué, «cada que se le planta cara al terrorismo, el PNV se coloca en el lado equivocado». La formación nacionalista, aseguró, «siempre ha acudido al auxilio de ETA y de todo este entramado». En su opinión, «es un error histórico y de una gravedad enorme que hay que desenmascar de una vez. Hay que desenmascar la cantidad de mentiras y victimización permanente en la que el PNV se ha instalado en los últimos años». Las palabras que José María Michavila, ministro de Justicia, dirigió al Gobierno vasco y al PNV no fueron menos duras. El ministro, en relación a la polémica político-judicial sobre la intervención de Egunkaria, afirmó que «me merece más confianza el juez Del Olmo, un profesional independiente, que el Gobierno vasco, que se querella contra los magistrados (Garzón) que actúan contra los terroristas (ilegalización de Batasuna)». Michavila señaló que «me defrauda la historia centenaria que el PNV dice tener como partido democrático, cuando pone obstáculos a los demócratas para luchar contra ETA». El ministro, a reglón seguido, aclaró que «el PNV no se opone porque sea bienintencionado sino por que le interesa la estrategia de chantaje y coacción (de los terroristas), porque se mueven muy cómodos» en esta situación. A la cascada de críticas se sumó también al vicepresidente primero, Mariano Rajoy, que calificó de «decisión lamentable» que el Gobierno vasco siga dispuesto a financiar a Egunkaria o a su sucesor, Egunero, «porque se trata de dinero público». El vicepresidente dijo que esta actitud es «una auténtica provocación, impropia de un gobierno democrático».