Mayor Oreja asegura que existe una ofensiva nacionalista del PNV y CiU

Mayor Oreja, responsable del programa para las elecciones del 25 de mayo, inauguró en la sede del PP un seminario sobre los ejes de la oferta de su partido para esos comicios. Como hizo José María Aznar la víspera, animó a los dirigentes populares a sobreponerse y se declaró «muy orgulloso» de pertenecer a un partido con un comportamiento «ejemplar», una conducta inusual en las fuerzas de centroderecha en la historia de España ya que no han sido paradigmas de «unidad» en los momentos difíciles. Alertó, asimismo, de «los peligros» que acechan personalizados en la izquierda y el nacionalismo. El ex ministro de Interior advirtió que la guerra no puede «enmascarar los problemas de convivencia» que se ponen de manifiesto en la existencia de «dos izquierdas», una con la que se pueden «compartir valores» y otra, «obsesionada con la derrota del PP» que utiliza «la violencia cotidianamente». Es, prosiguió, una izquierda «radical y violenta» que en contra de lo que se prensaba «no ha desaparecido y está ahí» para reproducir comportamientos «viejos». El segundo flanco que pone en peligro la convivencia es el resurgir de un nacionalismo extremo, que en el País Vasco «ha elevado el tono de su desafío» y en Cataluña ha optado «más por la radicalidad que por el ''seny'' catalán». Mayor Oreja sostuvo que la propuesta de Estatuto para Cataluña de CiU es «una ruptura más que una reforma». El reto planteado por la federación catalana se complementó, según el análisis del dirigente popular, con la propuesta del líder del PSC para el reconocimiento de Cataluña como nación y la celebración de un referéndum en 2005. Una iniciativa ante la que el PSOE guarda un «sonoro silencio, elocuente y significativo». Ante este cuadro, Mayor Oreja sostuvo que una vez que finalice la guerra contra Irak «la primera gran cuestión» será hacer frente a «la ofensiva nacionalista» en el País Vasco y Cataluña, y la fortaleza de la reacción dependerá en buena medida de los resultados del 25 de mayo. El responsable del programa del PP manifestó que en ambas comunidades se han producido dos síntesis, aunque distintas. En Euskadi, entre el PNV, que se encarga de la defensa del derecho de autodeterminación en las ciudades, y ETA, que hace lo propio en el mundo rural. En Cataluña, la síntesis se produce entre el nacionalismo y la «frivolidad» de la izquierda que comparten objetivos soberanistas. En Galicia, añadió, también hay «una ofensiva» del Bloque Nacionalista Galego cuyo calado se podrá medir tras las elecciones.