Aparece la fortuna de Sadam

El premio gordo de la lotería les tocó dónde menos lo esperaban. El sargento Buff y el soldado Van Ess habían salido a desbrozar un camino cercano al Tigris cuando unas pequeñas casas, ocultas entre árboles y rosales, llamaron su atención. Las ventanas selladas y las puertas sospechosamente inmaculadas les hicieron pensar mal. Y acertaron: entraron en lo que parecía un chalet residencial y se toparon con la friolera de 160 millones de dólares, guardados nuevecitos en 40 cajas de aluminio del Banco Nacional de Jordania, según relató un oficial de EE.UU a Los Ángeles Times. Minutos después las tropas entraban en la casa de al lado, ubicada en una zona arbolada junto al Palacio Presidencial de Sadam. Allí se ocultaban otros 160 millones. Los registros se sucedieron, hasta que el botín sumó 656 millones, repartidos en cuatro chalets en los que residían miembros del Partido Baaz y oficiales de la Guardia Republicana de Sadam. Tan suculento era el premio que algunos no pudieron soportar la tentación y forzaron una de las cajas blindadas, de la que se llevaron 600.000 dólares. Horas más tarde, en la madrugada del viernes al sábado, el dinero robado aparecía escondido en un árbol, donde supuestamente lo habían escondido tres marines. Para evitar nuevas pérdidas, el mando central se hizo cargo del botín que, según informaron desde el Departamento de Tesoro de Estados Unidos será devuelto al pueblo iraquí. ¿Y de dónde venía el dinero? Un oficial del antiguo regimen iraquí explicó que los billetes forman parte del tesoro privado de la familia Husein, obtenido mediante la venta de petróleo al margen del programa de intercambio de petróleo por alimentos. «Es dinero ilícito acumulado durante años por Uday Husein, con operaciones en países como Jordania, y escondido por la gente de su hermano Qusai, ante la imposibilidad de sacarlo todo de Bagdad», apuntó este oficial iraquí. Ahora, los fondos se destinarán a crear el nuevo Gobierno de Irak, para desesperación del sargento Buff y el soldado Van Ess, que fueron millonarios durante unos minutos.