Más de 40 ayuntamientos han sido gobernados con alianzas en esta legislatura, una constante desde los comicios de 1979
León afrontará la primeras elecciones del siglo con el horizonte de los pactos
Los partidos políticos de León arrancarán hoy por la noche la campaña de las primeras elecciones municipales y autonómica
LEÓN. M.R./J.A.O./M.C./P.I. Redacción El alcalde de León y candidato del PP, Mario Amilivia, que ha gobernado en esta legislatura gracias a un pacto con UPL se muestra convencido de que esta vez, a diferencia de hace cuatro años, obtendrá mayoría absoluta y de que no necesitará pactos. En una rueda de prensa para hacer balance de su gestión en cambio sí hizo referencia a ellos y a que están en el aire, en un reconocimiento implícito de que estas elecciones están muy reñidas y caras para todos los partidos políticos. Aseguró que el candidato del PSOE, Francisco Fernández, no quiere debates con él porque socialistas y leonesistas «tienen un pacto cerrado para gobernar» tras el 25-M porque están convencidos que no habrá mayorías absolutas, algo que Amilivia prevé que no ocurrirá. El candidato del PP llegó a asegurar que el rumor de que el pacto PSOE-UPL es tan real que se da como certeza ya en los corrillos políticos y en los propios pasillos del ayuntamiento de León. Un acuerdo, aseguró él mismo, que trasciende a esta institución y alcanza la diputación y la propia Junta si se diera el caso: el mismo comentario lleva circulando hace semanas por la capital en los «mentideros» políticos. Las encuestas internas que manejan los partidos para la capital de la provincia parece que indican en todos los casos, y coinciden, en que nadie podrá gobernar sin contar con alguna otra fuerza. Pactos parece que van a ser necesarios también en varias «plazas» importantes de la provincia. Un ejemplo es Villablino. Nadie se atreve a asegurar que Guillermo Murias revalide la mayoría para IU; al PSOE le auguran también las encuestas internas un crecimiento que nadie se atreve a desvelar y el PP es allí la incógnita: no se sabe si crecerá o no. Así, no es extraño que se haya acusado a Murias de hacer guiños al PSOE desde hace semanas para lograr un caldo de cultivo idóneo para después de las elecciones. La Bañeza es otra gran incógnita. La situación que ha vivido durante los dos últimos años de la legislatura que concluye ahora, el enfado del electorado y las divisiones internas en algún ··········· partido hacen que ninguna formación se atreva a aventurar resultados certeros; pero es también casi seguro -salvo sorpresa favorable al PSOE- que habrá que hacer encaje de bolillos para formar gobierno. Ponferrada es otra plaza con dudas. No existen encuestas, y la percepción política más extendida es que el PP va a volver a ganar. La traumática legislatura vivida tras el caso Nevenka Fernández y la dimisión de Ismael Álvarez han polarizado no ya política sino socialmente la ciudad. La presencia de ocho candidaturas, la irrupción de la UPL por primera vez en las listas y la división del bercianismo en dos partidos pueden deparar sorpresas y la necesidad de pactos. Sin dejar el Bierzo, la división que ha generado en el PSOE local la elaboración de las listas en Toreno -donde gobiernan el PP y la UPL con un pacto- pueden mantener la situación actual, y volver a repetir la necesidad de pactos. Algo similar, pero distinto, pasa en Torre del Bierzo, donde algún socialista tiene dudas de que se recupere la mayoría a pesar de las convulsiones habidas entre populares y leonesistas _que también mantienen allí un pacto_ durante la legislatura que concluye. Por último, destacan Boñar y La Robla. en el primero de los casos hay divisiones en casi todos los partidos y varias listas nuevas, fruto de las escisiones. La percepción en el municipio es que nadie va a obtener más de dos representantes y que los pactos para gobernar van a ser obligatorios; incluso se advierte de la ingobernabilidad que pueden deparar las urnas para toda la legislatura. En La Robla el PSOE asegura que recuperará la mayoría absoluta. En cambio existen dudas. Sí es cierto que en la ciudadanía se aprecia cansancio por la ruptura y la pelea política que ha habido en el tripartito que permitió gobernar a IU, UPL y PP, partido este último del que se acabaron escindiendo dos concejales, dejando en minoría al equipo de gobierno. La Diputación Del resultado en estos municipios y en el alfoz de León _en donde el PSOE espera «recuperarse», el PP crecer y la UPL avanzar_ va a depender el reparto de diputados provinciales. Todos los partidos políticos reconocen en privado que la campaña electoral va a ser dura y decisoria para los resultados, como no lo ha sido en años. Los socialistas tienen como meta recuperar el alfoz, gran parte de los municipios antes citados y crecer en el Bierzo, donde en la legislatura anterior perdieron presencia a pesar de ser junto al Ërbigo su «plaza fuerte» y granero de votos. De ello dependerá también el Consejo Comarcal del Bierzo, donde ahora sólo aventaja al PP en un representante, que es el que le da la mayoría (el resto de fuerzas no tienen representación); se muestran convencidos de que no sólo no lo perderán sino que aumentarán la ventaja. De si el PSOE vuelve a ganar terreno en los municipios y de si la UPL o IU consiguen gobernar algún ayuntamiento más de los que mantienen en la actualidad dependerán la Diputación. De no haber mayorías absolutas en el Palacio de los Guzmanes se harán necesarios los pactos; y vuelve al estrado el que se da por hecho para León entre leonesistas y socialistas. Un «matrimonio» que cambiaría las tornas respecto a la presente legislatura, donde la UPL «prefirió» al PP como «novia»; a la par significaría un éxito para el leonesismo, que siempre ha intentado y pedido a los votantes que les permitan gobernar o, cuando menos, ser llave del poder político en León. LEÓN. M.R./J.A.O./M.C./P.I. Redacción El alcalde de León y candidato del PP, Mario Amilivia, que ha gobernado en esta legislatura gracias a un pacto con UPL se muestra convencido de que esta vez, a diferencia de hace cuatro años, obtendrá mayoría absoluta y de que no necesitará pactos. En una rueda de prensa para hacer balance de su gestión en cambio sí hizo referencia a ellos y a que están en el aire, en un reconocimiento implícito de que estas elecciones están muy reñidas y caras para todos los partidos políticos. Aseguró que el candidato del PSOE, Francisco Fernández, no quiere debates con él porque socialistas y leonesistas «tienen un pacto cerrado para gobernar» tras el 25-M porque están convencidos que no habrá mayorías absolutas, algo que Amilivia prevé que no ocurrirá. El candidato del PP llegó a asegurar que el rumor de que el pacto PSOE-UPL es tan real que se da como certeza ya en los corrillos políticos y en los propios pasillos del ayuntamiento de León. Un acuerdo, aseguró él mismo, que trasciende a esta institución y alcanza la diputación y la propia Junta si se diera el caso: el mismo comentario lleva circulando hace semanas por la capital en los «mentideros» políticos. Las encuestas internas que manejan los partidos para la capital de la provincia parece que indican en todos los casos, y coinciden, en que nadie podrá gobernar sin contar con alguna otra fuerza. Pactos parece que van a ser necesarios también en varias «plazas» importantes de la provincia. Un ejemplo es Villablino. Nadie se atreve a asegurar que Guillermo Murias revalide la mayoría para IU; al PSOE le auguran también las encuestas internas un crecimiento que nadie se atreve a desvelar y el PP es allí la incógnita: no se sabe si crecerá o no. Así, no es extraño que se haya acusado a Murias de hacer guiños al PSOE desde hace semanas para lograr un caldo de cultivo idóneo para después de las elecciones. La Bañeza es otra gran incógnita. La situación que ha vivido durante los dos últimos años de la legislatura que concluye ahora, el enfado del electorado y las divisiones internas en algún ··········· partido hacen que ninguna formación se atreva a aventurar resultados certeros; pero es también casi seguro -salvo sorpresa favorable al PSOE- que habrá que hacer encaje de bolillos para formar gobierno. Ponferrada es otra plaza con dudas. No existen encuestas, y la percepción política más extendida es que el PP va a volver a ganar. La traumática legislatura vivida tras el caso Nevenka Fernández y la dimisión de Ismael Álvarez han polarizado no ya política sino socialmente la ciudad. La presencia de ocho candidaturas, la irrupción de la UPL por primera vez en las listas y la división del bercianismo en dos partidos pueden deparar sorpresas y la necesidad de pactos. Sin dejar el Bierzo, la división que ha generado en el PSOE local la elaboración de las listas en Toreno -donde gobiernan el PP y la UPL con un pacto- pueden mantener la situación actual, y volver a repetir la necesidad de pactos. Algo similar, pero distinto, pasa en Torre del Bierzo, donde algún socialista tiene dudas de que se recupere la mayoría a pesar de las convulsiones habidas entre populares y leonesistas _que también mantienen allí un pacto_ durante la legislatura que concluye. Por último, destacan Boñar y La Robla. en el primero de los casos hay divisiones en casi todos los partidos y varias listas nuevas, fruto de las escisiones. La percepción en el municipio es que nadie va a obtener más de dos representantes y que los pactos para gobernar van a ser obligatorios; incluso se advierte de la ingobernabilidad que pueden deparar las urnas para toda la legislatura. En La Robla el PSOE asegura que recuperará la mayoría absoluta. En cambio existen dudas. Sí es cierto que en la ciudadanía se aprecia cansancio por la ruptura y la pelea política que ha habido en el tripartito que permitió gobernar a IU, UPL y PP, partido este último del que se acabaron escindiendo dos concejales, dejando en minoría al equipo de gobierno. La Diputación Del resultado en estos municipios y en el alfoz de León _en donde el PSOE espera «recuperarse», el PP crecer y la UPL avanzar_ va a depender el reparto de diputados provinciales. Todos los partidos políticos reconocen en privado que la campaña electoral va a ser dura y decisoria para los resultados, como no lo ha sido en años. Los socialistas tienen como meta recuperar el alfoz, gran parte de los municipios antes citados y crecer en el Bierzo, donde en la legislatura anterior perdieron presencia a pesar de ser junto al Ërbigo su «plaza fuerte» y granero de votos. De ello dependerá también el Consejo Comarcal del Bierzo, donde ahora sólo aventaja al PP en un representante, que es el que le da la mayoría (el resto de fuerzas no tienen representación); se muestran convencidos de que no sólo no lo perderán sino que aumentarán la ventaja. De si el PSOE vuelve a ganar terreno en los municipios y de si la UPL o IU consiguen gobernar algún ayuntamiento más de los que mantienen en la actualidad dependerán la Diputación. De no haber mayorías absolutas en el Palacio de los Guzmanes se harán necesarios los pactos; y vuelve al estrado el que se da por hecho para León entre leonesistas y socialistas. Un «matrimonio» que cambiaría las tornas respecto a la presente legislatura, donde la UPL «prefirió» al PP como «novia»; a la par significaría un éxito para el leonesismo, que siempre ha intentado y pedido a los votantes que les permitan gobernar o, cuando menos, ser llave del poder político en León.