Guerra prefiere las pancartas a Bush

Alfonso Guerra irrumpió este domingo en la campaña electoral con un mitin que hizo las delicias de sus seguidores y en el que no dejó títere con cabeza en sus críticas al Gobierno. El ex numero dos del PSOE respondió las acusaciones vertidas contra la oposición por parte de José María Aznar, defendió la participación de los socialistas en las protestas contra la guerra y negó al presidente del Ejecutivo autoridad moral para hablar de «manos limpias» cuando, según dijo, en el PP tienen las manos manchadas «con sangre de niños iraquíes». «Nosotros nos situamos detrás de las pancartas de los ciudadanos, pero ellos se refugian en las faldas del presidente de los Estados Unidos, en las faldas del Opus Dei o en las faltas de los Legionarios de Cristo», dijo el ex vicepresidente del Gobierno, que arremetió contra José María Aznar por presumir de que en el Partido Popular tienen las «manos limpias» mientras interviene en Irak.