La asignatura pendiente es recuperar el pecio del petrolero

La asignatura pendiente es ahora el pecio del petrolero. Hundido a 3.800 metros de profundidad a unas 133 millas de las islas Cíes, el barco representa un inmenso riesgo medioambiental. En su interior conserva casi 40.000 toneladas de fuel, cuya extracción sigue siendo un quebradero de cabeza para las autoridades. El Comité Científico Asesor ha recomendado que las labores de extracción del combustible comiencen antes del próximo otoño, pero la extrema dificultad de la operación -nunca se ha recuperado carburante a tanta profundidad- convierte en una quimera la operación. El Gobierno ha pedido ayuda a las compañías petroleras para colaborar en el rescate. Repsol tiene previsto realizar los primeros ensayos en el mes de junio, pero antes el batíscafo francés «Nautile» -que entre diciembre y febrero selló una veintena de grietas abiertas en el casco del buque- regresará a finales de este mes para comprobar su estado y reforzar su impermeabilización.