La Audiencia Nacional cita al director de ETB por emitir el vídeo de ETA

El Gobierno apoyó la iniciativa del Ministerio Público porque la divulgación de las opiniones del grupo terrorista en un medio público es «un asunto de enorme gravedad». Mariano Rajoy insistió en que existe un intento de acuerdo entre el PNV y los terroristas y que las últimas contradicciones son la expresión de «un problema para ver quien lidera el proceso», en referencia al soberanismo vasco. El fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, a instancias de su superior jerárquico, Jesús Cardenal, tiene previsto enviar el lunes una citación al máximo responsable de ETB, Bingen Zupiria, para que esclarezca las circunstancias que motivaron la emisión del vídeo en el que tres encapuchados rechazaron el plan Ibarretxe, pidieron el voto nulo para las listas de AuB en las elecciones del 25 de mayo y negaron que ETA haya declarado una tregua tácita. Si a raíz del interrogatorio, Fungairiño aprecia indicios de delito presentaría una denuncia ante el juzgado de guardia de la Audiencia Nacional. Mariano Rajoy, quien negó que el Ejecutivo haya impulsado la actuación de la Fiscalía sino que ha actuado movida por «sus responsabilidades», sostuvo la difusión fue un acto de «propaganda» de una organización terrorista en una televisión pública «pagada por todos los contribuyentes» que no se puede escudar en el argumento de la divulgación de «una noticia». El vicepresidente consideró que, además de ser «un acto lamentable», hubo cierto grado de complicidad de ETB porque anunció que se iba a emitir la cinta. El vicepresidente, en la valoración del mensaje terrorista, indicó que el Gobierno no se cree nada de lo dicho por los portavoces de ETA. Advirtió de que fue un intento de tener «protagonismo» en la campaña electoral y «enredar» en un momento «difícil» para la organización. Lejos de aclarar el panorama, añadió, ETA aportó confusión porque hace unos días, «dijo una cosa», en referencia al comunicado en el que apreció aspectos positivos en el plan Ibarretxe, ahora, «dice otra», rechaza la propuesta soberanista, y para rematar Otegi, apunta «otra» cuando afirma que los terroristas no se cierran a declarar una tregua. Rajoy rechazó que el vídeo suponga un desmentido a la tesis gubernamental de que existe un intento de reeditar el acuerdo de Lizarra de 1998 porque «es legítimo y razonable pensar que existe un proceso similar» a la luz de las actuaciones del PNV y los terroristas. Sostuvo que la, a su juicio, aparente contradicción entre los mensajes del nacionalismo, ETA y Otegi son la expresión «de un problema para ver quién lidera este proceso» soberanista.