«Comarcalizar es duplicar órganos»

-Las competencias impropias, ¿pueden complicar el Pacto Local con la Junta? -Todo tiene un punto de equilibrio. Una cosa son las competencias impropias de las diputaciones y otra la voluntad política del PP de descentralización autonómica, que creo que son compatibles. Unas deben de volver a quien las debe ejercer por ley y otras son de ese marco de que los servicios los preste quien más próximo esté a los ciudadanos y que éste que tenga la garantía financiera suficiente de que se puedan prestar bien; son procesos compatibles. -Hay partidos que apuestan por la comarcalización. -El hecho comarcal puede obedecer a razones culturales o diferenciaciones singulares dentro de una provincia. Pero crear entidades administrativas nuevas, cuando no lo hacen en comunidades donde ellos gobiernan, como Extremadura o Andalucía, es volver a duplicar órganos administrativos con lo que ello comporta. La labor de la Diputación es la ordenación de todos los recursos, y creo que las mancomunidades deben jugar un papel fundamental como prestadoras de servicios a los municipios. Las fuertes, con recursos, bien gestionadas son la mejor garantía de que en el medio rural haya servicios con garantías. Es fundamental ser sensible con las aspiraciones de los municipios y mancomunidades porque conocen muy bien cuáles son los problemas; y la Diputación lo que tiene que hacer son políticas globales de coordinación.