Atutxa dimitirá antes de disolver SA en contra del Parlamento vasco

En estas circunstancias, Atutxa advirtió de que está dispuesto a defender «hasta el final la dignidad, el derecho y la razón que creo nos asiste». Así apostó por «suscribir mi dimisión antes de hacer dejación de su obligación en la defensa de la legitimidad y dignidad» de la cámara. Atutxa sostuvo ayer que, una vez más, «se ha procedido a invadir un área que corresponde a este legislativo». A pesar de todo, el presidente de la cámara vasca reconoció estar «en un callejón sin salida», «y no sabemos hacia dónde tirar porque cualquier decisión puede ser considerada un incumplimiento». En cualquier caso, la decisión que adoptará la presidencia del Parlamento vasco no se conocerá hasta el martes de la semana que viene, día en que se reúne la Mesa de Presidencia. Lo que sí es seguro es que tanto Atutxa como la mayoría nacionalista de este órgano defenderán «la independencia de la cámara», aunque «seremos respetuosos en la lectura, en el análisis y en las decisiones de todo documento que provenga de cualquier parte», pero insistiendo en la «defensa a ultranza de lo que entendemos debe ser defendido como dignidad de esta institución». Cambio de reglamento Para aplicar la resolución judicial sería necesaria la modificación del reglamento del Parlamento Vasco, y es ahí dónde nacionalistas e Izquierda Unida denuncian la invasión de competencias. En cualquier caso, para afrontar esa modificación sería necesaria la celebración de un pleno y una votación, una situación para la que los partidos ya han anunciado su postura. Populares y socialistas apoyará el cambio, pero no así los grupos del gobierno. El presidente del PNV, Xabier Arzalluz anunció en Bilbao que su grupo defenderá «con todas las consecuencias» y «hasta el final» la «autonomía organizativa» del Parlamento vasco frente al Supremo. Para el dirigente nacionalista, es un «abuso de poder» porque «no le compete» al Supremo ordenar la disolución de ningún grupo, la justicia «entra en la inviolabilidad» del legislativo y va «contra toda la doctrina parlamentaria y la teoría del Estado». En este sentido, esgrimió doctrina del Tribunal Constitucional y reflexiones del fiscal general del Estado que avalan la diferencia existente entre partidos políticos y grupos parlamentarios. Para el miembro del PP Carmelo Barrio, el presidente del Parlamento vasco desacredita a la institución «al enfrentarla a los jueces y al convertir la Cámara en escondrijo de los terroristas y en instrumento del ''plan Ibarretxe''». Barrrio recordó que es «rotundamente falso» que la Mesa del Parlamento no pueda ejecutar la sentencia del Supremo sin antes modificar el reglamento. En este sentido, aclaró que las sentencias del Supremo «engloban el conjunto del ordenamiento jurídico español donde se integra el reglamento de la Cámara vasca como una ley más». Por ello, señaló que «la única actuación posible de Atutxa es dar los pasos administrativos para cumplir la orden del Supremo, pasos perfectamente asumibles y realizables con la sola voluntad de cumplir una sentencia judicial».