IU recupera la autoestima
«Izquierda Unida ha recuperado la autoestima». Lo dice su líder, Gaspar Llamazares, tras 15 intensos días de campaña electoral por toda España. En ese tiempo, ha comprobado que su partido ha salido del pozo en el que cayó tras los comicios municipales de 1999 y generales de 2000. Hoy, asegura, la organización está «muy cohesionada», actúa en sus distintas federaciones «como una sola persona» y ha conseguido recomponer sus alianzas y su proyecto de izquierdas. Gaspar Llamazares asegura que es «optimista», pero se nota que está exultante. Las encuestas que maneja la coalición de izquierda le auguran una subida importante, que éstas podrían ser «sus» elecciones. Es su primera campaña a nivel nacional, se ha sentido «cómodo» en los mítines y percibe que este domingo van a superar «todas las expectativas». Si ese vaticinio se cumple, IU podría tener el día después la llave de la gobernabilidad en algunas autonomías y en ayuntamientos importantes en los que el PP pierda la mayoría absoluta. En ese sentido, deja claro cuál será su postura: «si es por nosotros, el PP no gobernará en ningún sitio». Llamazares atribuye esas buenas expectativas a que han sabido conectar con la sociedad, en la calle -las manifestaciones- y desde las instituciones en las que participan. Está convencido de que la clave de su reflote ha estado en recuperar la iniciativa política y transmitir a los ciudadanos su ilusión y su orgullo. «El orgullo de la gente que cree que otro mundo es posible», explica. El objetivo es, asegura, «aglutinar» a esas personas -comunistas, socialistas, republicanos, homosexuales, feministas, pacifistas, e incluso religiosos- en torno a su proyecto, para que sean «fermento de políticas alternativas en gobiernos de izquierdas que respondan a las inquietudes de los ciudadanos». Será difícil, pero es por ahí por donde pasa la «renovación» que Llamazares aspira a completar ¿La meta? Dotar a una organización antes obrera y marxista de una orientación más social, en la que «quepa una orientación ecopacifista». En esta campaña, Llamazares no se ha cansado de poner a las ciudades y comunidades en las que cogobiernan -Córdoba, Baleares, País Vasco- como ejemplo de lo que su proyecto representa. «Empleo público de calidad, vivienda social, y más participación ciudadana» en la toma de decisiones políticas.