| Crónica | Renovadores por la Base |
Nacidos para incordiar
La crisis desatada en la Comunidad de Madrid tiene su base en los enfrentamientos históricos entre las «familias» de la Federación Socialista Madrileña. Eduardo Tamayo y Teresa Sáez forman parte del sector Renovadores por la Base, también conocidos como «los balbases» por José Luis Balbás, creador de este grupo en 1994. Casi dos lustros de vida en los que esta minoría ha hecho y deshecho acuerdos y ha hecho la vida imposible a los sucesivos secretarios regionalesque se han sucedido al frente de la organización. Balbás, que llegó al PSOE de la mano del socialdemócrata Francisco Fernández Ordóñez, que fue ministro de Justicia de UCD y de Asuntos Exteriores del PSOE, se dio a conocer en 1999, cuando Joaquín Leguina quiso ser candidato a la Alcaldía de Madrid, pero fue derrotado por Fernando Morán gracias al apoyo de los «balbases», que en principio apostaron por el ex presidente de la Comunidad de Madrid. Los Renovadores por la Base han estado en el centro del reparto de poder en la federación en los últimos diez años, creando numerosos problemas. Además de la situación vivida por Leguina, este grupo comenzó insinuando su apoyo a José Bono de cara al Congreso del PSOE en el que salió elegido José Luis Rodríguez Zapatero, al que al final apoyaron. Este grupo, creado en su día por militantes sin cargos institucionales ni orgánicos, se considera representado en la Ejecutiva del partido por el secretario de Innovación y Comunicación Interna, Enrique Martínez.