«Me siento como si fuera un pelele»

José Manuel Prejigueiro es un trabajador del sector del metal que ha cubierto todas las etapas de la marcha que los obreros comenzaron hace unos días en Ponferrada. Como sus compañeros, ha participado en esta iniciativa de protesta. De ella conserva un sabor agridulce, mezcla de satisfacción por el deber cumplido y de pesar por haber tenido que llegar a estos extremos para reclamar un mejor convenio. -¿Por qué se decidió a participar en la marcha? -Para que se nos oiga y se sepa que estamos siendo manipulados por una patronal que no quiere ni siquiera tener una conversación con nosotros para darnos lo que estamos pidiendo, porque se niegan rotundamente a negociar. -¿Alguna vez en su vida de trabajador pensó que se vería en una situación de este tipo? -No, es la primera vez que lo hago. -¿Y cómo se siente? -Como si fuera un pelele. -¿Está satisfecho de marchar junto a sus compañeros para reclamar algo que consideran justo? -Hombre, claro. -¿Cree que este tipo de reivindicaciones son necesarias en este momento, y si lo cree, por qué motivo? -Porque es la única forma de que nos escuchen y se den cuenta de que la gente trabajadora también tiene derechos. -¿Qué ha sido lo mejor del recorrido? -El compañerismo, que hace que llevemos bien la marcha, animadamente. -¿Cómo lleva su familia que esté estos días fuera de casa? Muy mal, evidentemente. A nadie le gusta que te tengas que ir de casa para pedir migajas, porque eso es lo que estamos pidiendo. -Los trabajadores ¿han perdido parte de su capacidad reivindicativa de hace unas décadas? Sí, totalmente, hay que empezar otra vez desde cero y demostrar que tenemos derecho a pedir cosas que sean justas, como la igualdad en la comunidad, ya que la provincia de León es una de las más bajas de Castilla y León en cuanto a nivel salarial comparada con otras como Salamanca. Es muy triste.