El juez encarcela al guardia civil que mató a dos compañeros en Albacete

? El juez de instrucción número 8 de Albacete, César Sempere, ordenó ayer el ingreso en prisión del teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Peñafiel, que el pasado 17 de junio disparó a tres compañeros en la Comandancia de Albacete, dos de los cuales fallecieron. El magistrado visitó durante la mañana al homicida en el Hospital General Universitario de Albacete, donde éste se recupera de las heridas que él mismo se provocó en la cabeza al tratar de suicidarse después de haber matado al comandante Isidoro Turrión y al médico Francisco Naharro -padre de la actual delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Encarnación Naharro- y de haber herido al teniente coronel Antonio Lázaro, actual jefe de la Comandancia. El juez no llegó a interrogar al teniente coronel en atención a su estado de salud, y se limitó a comunicarle que había ordenado prisión atenuada por dos delitos de asesinato consumado y uno de asesinato frustrado y ordenó su traslado al Hospital Militar Gómez Ulla, de Madrid, que se realizará en cuanto los facultativos que lo atienden así lo autoricen. El magistrado Sempere se limitó a apuntar a la salida del hospital que Peñafiel «se recupera muy bien y por eso hemos venido a decidir sobre su situación personal». Enajenación transitoria En la estuvieron presentes todas las partes personadas en el caso, entre ellas el abogado defensor de Peñafiel, Marcos García Montes, que pidió disculpas a los familiares de los dos fallecidos en nombre de su cliente, que dijo no recordar nada de lo sucedido el 17 de junio. Según el, «él dice que se enteró de todo esto escuchando frases inconexas y que se lo ha ido diciendo la familia». El abogado, que ahora se mantendrá a la espera de que el juez fije una fecha para la toma de declaración, tiene previsto alegar una enajenación transitoria fruto de la tensión personal vivida por su cliente en los últimos meses para que no sea condenado. El teniente coronel Peñafiel dirigió la Comandancia de Albacete hasta el pasado mes de febrero, cuando la Dirección General de la Guardia Civil lo relevó después de que hubiera denunciado presuntos tratos de favor hacia determinados oficiales del cuartel en el reparto de los pluses de productividad.