Diario de León

Liposucción, corrección de la nariz, pecho u orejas son las intervenciones más solicitadas en los centros de estética

Más de 1.000 leoneses pasan cada año por el quirófano para mejorar su aspecto físico

La Junta acredita ocho centros para intervenciones y cuatro para tratamientos

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R. Martín - león
León

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El sector de la cirugía estética factura más de 1.000 millones de euros al año en España. una cifra que va en aumento cada año como lo hace el número de intervenciones. Cada día más de 800 personas se someten a alguna de estas intervenciones para mejorar su estética, por obligación (cirugía reparadora) o por deseo. España es, así, tras Estados Unidos, el segundo país donde más intervenciones se efectúan, un número que crece en más de un 15% anual. Hallar datos sobre las intervenciones que se pueden realizar en León es prácticamente imposible ya que los centros privados no facilitan datos de pacientes o clientes y la Junta, el organismo competente en control, carece de cualquier estudio sobre las intervenciones. No obstante, las clínicias sí reconocen que en los últimos años se ha producido un incremento de la demanda, en parte por la apertura de la especialidad a los varones, antes reticentes a las intervenciones. A pesar de esta falta de datos, no es descabellado hablar de más de un millar de intervenciones anuales, excluyendo por supuesto los tratamientos que no requieren intervención en quirófano y entre los que la depilación con láser o la inyección de sustancias como colágeno han pasado a ser miles. En León, según los datos facilitados por Corporación Dermoestética, no existen diferencias con el resto de España en el tipo de intervenciones quirúrgicas más demandadas. Las operaciones más solicitadas por las mujeres son la liposucción (eliminación de grasa localizada en una determinada parte del cuerpo), la mamoplastia de aumento, la rinoplastia (corrección de nariz) y la abdominoplastia (reducción de abdomen). En cuanto a los hombres, las operaciones más demandadas son, en primer lugar, la liposucción seguida de la rinoplastia y, en tercer lugar, la otoplastia, corrección de las orejas desplegadas. Por último, es común también la realización de la blefaroplastia, eliminación de las bolsas y ojeras y de los ojos. El perfil medio de los pacientes en León es el de una mujer trabajadora, de 35 años de edad de media, y que tiene independencia económica por su incorporación laboral. «La mayor motivación es el deseo de mejorar aquella parte del cuerpo que el paciente quiere modificar y el cirujano plástico considera susceptible de mejora. Gracias a la cirugía estética, el problema se corrige y la persona se siente mejor consigo misma y en su relación con los demás. Está comprobado que tras una operación de estética se mejora la autoestima y las personas se siente más seguras», indica el doctor Carlos Gullón, cirujano plástico y reparador. Demanda de los adolescentes La demanda de intervenciones quirúrgicas entre los adolescentes también está en franco crecimiento si bien en esta clínica puntualizan que ningún menor de edad pueda pasar por el quirófano. «Las operaciones de estética no suelen estar indicadas hasta que la persona ha completado su total desarrollo, éste es el caso de la mamoplastia de aumento o la rinoplastia», explica desde el centro médico. Asimismo, el doctor Gullón precisa que debe ser el cirujano quien estudie cada caso y determine la «pertinencia o no de la intervención». El doctor Gullón precisa que la satisfacción con el resultado de un intervención no desencadena directamente otro paso por el quirófano. «Normalmente suelen ser operaciones puntuales con las que una vez corregido el defecto se consigue la plena satisfacción del cliente». No es frecuente añade el caso de pacientes que se realizan varias operaciones distintas. En cuanto al mito de las intervenciones primaverales, el doctor Gullón lo echa abajo de una forma clara. «Las intervenciones se realizan a lo largo de todo el año. Quizá de cara al verano se note un incremento general en cuanto a la demanda de cirugía y tratamientos estéticos, pero no es muy acusado. Sin embargo, también se perciben incrementos en el mes de septiembre, cuando se vuelve a la rutina y el trabajo, y tras las navidades, en el mes de enero, cuando solemos realizar los planteamientos para el año nuevo».

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