Contra toda investigación

EL GOBIERNO y su partido hacen horas extraordinarias para impedir que se investiguen, con comisiones parlamentarias de investigación o sin ellas, los temas de mayor calado y más controvertidos que les atañen. El ejercicio de la mayoría absoluta lo han convertido en una rutina enervante que genera el furor de la oposición y la melancolía de los ciudadanos. Negar comisiones parlamentarias o vías adecuadas para investigar asuntos como el accidente del Yakovlev, las mentiras de las armas de destrucción masiva o la muerte de José Couso, el cámara de Telecinco, en Bagdad, es un comportamiento que no resiste el más somero análisis. Y más si se tiene en cuenta cómo utilizan su mayoría ilegítima en la Asamblea de Madrid para salirse con la suya en el famoso asunto de la comisión de investigación sobre el gran escándalo político-inmobiliario. Al fin y al cabo, en el Congreso de los Diputados tienen una mayoría absoluta derivada de las urnas, mientras que en Madrid la mayoría absoluta de la izquierda le ha sido arrebatada, para hacerse ilegítimamente con ella el PP, que nunca debió aceptarla porque no era suya. La mayoría absoluta en el Congreso es legítima, por supuesto, por lo que el uso que están haciendo de ella solamente se puede someter a la crítica política, sin otras derivaciones más graves. El PP llegó al poder bajo la firme promesa de la regeneración democrática, incluyendo la formación de comisiones de investigación sin necesidad de que las pidiera la mayoría de la Cámara. Pese a ello, se han negado sistemáticamente a admitirlas, y cuando lo han hecho, en contadísimas ocasiones, ha sido para deformarlas y jibarizarlas en lo que pudieran perjudicarles, o incluso para apalear a la oposición, como aquella vergonzosa comisión sobre aquellos 200.000 millones de pesetas que el Gobierno socialista habría perdonado fiscalmente a sus amigos, acusación que se demostró falsa, sin que al PP se le cayeran los palos del sombrajo. Lo que sucede es muy grave, pues se está impidiendo que la oposición cumpla con su deber y que los españoles se enteren de la verdad de lo que hace el Gobierno.