El ex fiscal pasará a ser un simple fiscal de a pie en el Supremo
Los conservadores apartan a Villarejo de Anticorrupción
Fernández Bermejo, enfrentado con Michavila, abandonará también la Fiscalía
Carlos Jiménez Villarejo abandonará la Fiscalía Anticorrupción el próximo fin de semana, después de ocho años en el cargo, cuando el Boletín Oficial del Estado (BOE) publique el nombramiento de su sustituto, el fiscal del Tribunal Supremo, Antonio Salinas. El fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, logró ayer que el Consejo Fiscal apoyase a Salinas, su candidato, con los votos de los fiscales conservadores. La designación del nuevo fiscal jefe Anticorrupción era el asunto estrella de la reunión del Consejo Fiscal, el máximo órgano de representación de la carrera, que también se pronunció sobre los candidatos más idóneos para renovar otras 18 jefaturas del Ministerio Fiscal. Las decisiones del consejo tienen un carácter meramente consultivo y es el fiscal general quien al final propone a sus candidatos, que luego deberán ser ratificados por el Consejo de Ministros. El consejo fiscal eligió a Salinas por un solo voto. Cinco de los miembros del órgano -cuatro de la conservadora Asociación de Fiscales (AF) y el teniente fiscal- le dieron su apoyo mientras que otros cuatro respaldaron a Jiménez Villarejo -tres de la Unión Progresista de Fiscales (UPF) y uno de la AF-. Un consejero, de la AF, se abstuvo. La victoria por la mínima de Salinas evitó tensiones dentro de la carrera por la sustitución, ya que Cardenal tenía previsto prescindir de Jiménez Villarejo en todo caso, con independencia del resultado de la votación. El ex fiscal jefe Anticorrupción se convertirá, por el momento, en un simple fiscal de a pie del Supremo, pues no quiso optar a ninguna otra jefatura del Ministerio Público diferente a la que ya ocupaba, pese a saber que no tenía opción a continuar en el cargo. Antonio Salinas, miembro de la UPF, pero desvinculado de la asociación desde hace años según sus portavoces, es fiscal del Supremo desde hace 14 años, donde se encargó de llevar la acusación en el caso Filesa , que juzgó una trama de financiación ilegal del PSOE. Salinas, de 56 años, también fue el único fiscal de la Sala de lo Penal del alto tribunal que se mostró contrario al procesamiento del ministro Josep Piqué por el caso Ertoil . El nuevo fiscal jefe está considerado con un buen profesional, con experiencia, serio y trabajador. El otro fiscal jefe que desde hace meses tenía contados sus días en el cargo era Mariano Fernández Bermejo, responsable del Ministerio Público en la Comunidad de Madrid, y enfrentado directamente a Cardenal y a José María Michavila. El Consejo Fiscal decidió rechazar la renovación de Fernández Bermejo y proponer para el cargo a Manuel Moix.