Balbás afirma que es un «cabeza de turco» para ocultar la crisis interna que atraviesa el PSOE en Madrid

José Luis Balbás dijo ayer en la comisión de investigación sobre la crisis de Madrid que es una «víctima» al que la dirección del PSOE ha utilizado como «cabeza de turco» para ocultar su «crisis interna», cuyo alcance está «aún por desvelar. En lo que calificó de «huida hacia delante de Zapatero y su equipo», aseguró que éstos se inventaron una «trama inmobiliaria inexistente», diseñada por Ruth Porta y Ramón Espinar. El líder de Renovadores por la Base afirmó que sólo intervino como «mediador informal» entre Eduardo Tamayo y José Blanco a petición («un encargo envenenado», dijo) del secretario de Organización del PSOE. Y que lo hizo para que el diputado rebelde reconsiderara su actitud, porque él no compartió la decisión de los diputados tránsfugas de ausentarse de la cámara el 10 de junio. Aunque sabía que Tamayo («un amigo como otros 500 ó 1.000», afirmó) estaba «descontento» por el incumplimiento de los supuestos acuerdos con la dirección socialista jamás se le ocurrió que iba a ausentarse de la Asamblea. El compareciente quiso dejar claro que fue «absolutamente decisivo» en la elección como secretario general de su «amigo personal» Rodríguez Zapatero. Incluso, afirmó, que sin el apoyo de sus 13 delegados en Madrid, «no hubiera sido ni candidato». Balbás aprovechó las preguntas del popular Antonio Beteta para detallar «las luchas de familia» y el «juego sucio» en el seno de la FSM. Sáez, incondicional de Tamayo Por su parte, la diputada del Grupo Mixto María Teresa Sáez reconoció ante la comisión de investigación de la Asamblea de Madrid en la noche del lunes que nunca planteó discrepancia alguna en los órganos internos del PSOE, sino que explicó que siempre se las comentaba al diputado Eduardo Tamayo y que era él, como líder de Renovadores por la Base en el Parlamento regional, quien se encargaba de transmitir estas quejas al partido. Así lo manifestó tras ser preguntada por el portavoz socialista en la comisión de investigación, Modesto Nolla, sobre si había planteado alguna vez en el seno del PSOE las discrepancias que, según ella, motivaron su decisión del pasado 10 de junio de ausentarse del Parlamento regional. Sáez respondió que nunca planteó estas quejas en el comité regional del partido porque «no sirve para nada, nos llevaban allí como borregos para hacer luego lo que les daba la gana», señaló. Preguntada sobre los acontecimientos que se produjeron el pasado 10 de junio Sáez dijo que se montó en un taxi con Tamayo sin saber a dónde se dirigían.