La Guardia Civil libera a un padre y su hija tras un secuestro de siete horas

La localidad pontevedresa de A Estrada vivió en la madrugada del miércoles una escena propia de una película de acción. Los vecinos de la zona vieron perturbado su descanso por una operación de la Guardia Civil que puso fin al secuestro que un hombre y su hija, de 12 años, sufrían desde hacía siete horas en el interior de su domicilio. La operación fue desarrollada por agentes del Equipo de Delincuencia Organizada (Eoda) y el Grupo de Seguridad Rural que se desplazaron hasta el lugar de los hechos tras recibir una llamada que les alertaba sobre la situación de las dos víctimas. La rapidez de la actuación permitió que en poco más de dos horas se liberase a Tomás Leis y a su hija y se detuviera a cuatro de los cinco hombres implicados en sus secuestros. Los presuntos secuestradores son tres hombres de nacionalidad colombiana, J. C.V. y H. A. M. J., ambos de 23 años, y A. D. V. C., de 34, y un cuarto natural de Málaga, de 30 años. Según fuentes de la investigación el dispositivo sigue en marcha ya que falta por detener un quinto implicado, posiblemente de origen magrebí, que logró huir pero ha sido identificado. Ajuste de cuentas El suceso se inició alrededor de la una y media de la madrugada cuando los cinco implicados en el secuestro acudieron hasta el domicilio de Tomás Leis y lo retuvieron en el interior junto a su hija. Como rescate pidieron el pago de 9.000 euros, un hecho que permite que adquiera fuerza la hipótesis de que podría tratarse de un ajuste de cuentas por deudas contraídas con relación a operaciones del narcotráfico, una actividad con la que la víctima tiene relación y por la que ya tuvo que responder ante la justicia en 1995. Fue el propio secuestrado el que logró alertar a la Guardia Civil, que llegó hasta el lugar de los hechos alrededor de las tres de la madrugada. A partir de ese momento el dispositivo de agentes desplazados en la zona, que contaron con el apoyo de un helicóptero, actuaron con rapidez. El elemento sorpresa fue lo que les permitió detener a dos de los secuestradores que se encontraban en el exterior vigilando la posible llegada de personas al lugar. Los otros tres lograron huir siendo detenidos antes de las cinco de la mañana dos de ellos