El general Sáenz de Santamaría compara a Aznar con Franco y con otros dictadores
El general José Antonio Sáenz de Santamaría, fallecido el lunes pasado, comparó a José María Aznar con Francisco Franco y con otros dictadores en una entrevista emitida el miércoles por Canal Plus, que se grabó por la cadena de pago con la condición de ser programada después de la muerte del militar. El ex director de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, en una entrevista sin concesiones, que hizo honor al nombre del programa en que se emitió, «Epílogo», ajustó cuentas con varios personajes de la vida pública y, especialmente, con el PP y con algunos de sus dirigentes históricos. Entre las varias revelaciones que realizó, dijo que Manuel Fraga, presidente gallego y ex líder de la derecha, cobró tres veces de los fondos reservados el valor del chalé que perdió en un atentado terrorista y que los gobiernos de UCD fueron los que iniciaron la «guerra sucia» contra ETA. Sáenz de Santamaría comentó que «Franco fue un hombre lleno de complejos, que luego fue ensoberbeciéndose, y llegó un momento en que se creía superior al resto». En su opinión, «todos los dictadores creen que son superiores y, como se rodean de una corte de aduladores, llega un momento en que hasta Aznar se cree alto». «Prueba de ello, añadió, es que se ha comprado una gabardina mucho mayor de su talla, y supongo que lo habrá hecho con fondos reservados». El militar consideraba que ahora en España hay «un Gobierno de reacción, que vuelve atrás». El general, que en los primeros años ochenta fue el máximo responsable de la lucha antiterrorista, dejó claro que la «guerra sucia» contra ETA no nació con Felipe González y con los GAL sino que se inició con los ejecutivos de UCD, en la segunda mitad de los setenta, que «bordeó la legalidad muchas veces», como lo demuestra el que hubiese en esos años 48 muertos de ETA. Esta constatación le hace calificar de «obscena» la «utilización política» que el PP hizo durante los últimos años de gobiernos socialistas del GAL y de los «errores» de la lucha antiterrorista, actitud que consideró «intolerable». Sáenz de Santamaría criticó con dureza a Baltasar Garzón, al que acusó de inventarse el «GAL verde» y de tener como único objetivo vengarse de Felipe González.