El asesino de la joven de Coín se hirió y dejó rastros de sangre en una tulipa

El asesino de Sonia Carabantes se hirió durante el crimen y dejó rastros de sangre en el lugar donde fue hallado el cadáver de la joven, Sonia Carabantes, de 17 años de edad, concretamente algunas gotas de sangre en una tulipa, según informaron fuentes de la investigación. Las mismas fuentes precisaron que también se hallaron restos de sangre del presunto autor material del crimen en las uñas de la vícitma, así como tejido epitelial, que podría corresponder a la piel de un brazo. Estos descubrimentos podrían abrir una nueva vía de investigación para esclarecer el crimen de la joven asesinada en Coín. En este sentido, destacaron la importancia de recabar la colaboración ciudadana en la localización del asesino de Sonia, ya que alguien del entorno de la joven podría haber llevado a la vista en las fechas de su desaparición algún vendaje que evidenciara haber sufrido una herida.