La banda terrorista aborda una reorganización interna sobre sus procedimientos y dirección
Detienen a un delegado de LAB por su supuesta pertenencia a ETA
Roberto Saiz Olmo y su novia, Ana López Barrio, pueden estar relacionados con el Comando Vizcaya
Agentes de la Ertzaintza trasladaron en la madrugada de ayer a dependencias policiales al delegado de LAB-Sanidad Roberto Saiz Olmo y a su novia Ana Lopez Barrio, dentro de las actuaciones que se llevan a cabo para desarticular el «comando Vizcaya» de ETA. Tras prestar declaración en dependencias policiales, se les ha detenido por su presunta relación con la banda terrorista, según el Departamento de Interior. La pareja fue localizada a las cuatro y media de la madrugada en las proximidades de la comisaría de la Policía Municipal de Portugalete por agentes de paisano de la Policía autónoma, que les invitaron a acompañarles para esclarecer algunos aspectos de la investigación relacionada con el «comando Vizcaya». Una pareja que iba con los ahora detenidos también fue retenida, pero fue puesta en libertad poco después, una chica en Ortuella y un varón en Portugalete. A lo largo de la noche, la Policía vasca ha continuado los registros encaminados a desarticular el operativo de la organización terrorista que actúa Vizcaya. Mientras continúan las detenciones policiales, ETA aborda una reorganización interna que afecta tanto a procedimientos como a dirección, según fuentes de la lucha antiterrorista. Esto supone como novedad la incorporación al «Comité Ejecutivo» de la organización de Gorka Palacios Alday, antiguo «liberado», a sueldo de la banda, de los «comandos Madrid» y «Andalucía» y uno de los etarras más buscados por las Fuerzas de Seguridad. Aparato militar Gorka Palacios habría accedido a la cúpula etarra tras su ascenso como jefe del «aparato militar» encargado de la actividad de los comandos operativos de la banda terrorista. De hecho, Palacios Alday habría impartido instrucciones precisas para mejorar el adiestramiento de nuevos etarras en el manejo de armas y explosivos, después de transferir sus cometidos al frente del aparato de «cursillos y formación» una vez adquirido un mayor peso en la banda. También, se le considera el promotor de medidas de seguridad internas como la de limitar los desplazamientos de los terroristas para reducir el riesgo que supone para los etarras acudir a entregas de explosivos y citas en puntos de encuentro habituales. Las mismas fuentes reconocieron albergar dudas respecto a la permanencia de Ibón Fernández Iradi, «Súsper», en el actual «Comité Ejecutivo» de la banda terrorista junto con Mikel Albisu Iriarte, «Mikel Antza», y tampoco tienen claro integre la cúpula etarra Félix Alberto de la Calle Gauna «Mobutu».