Aznar replica a Schroeder que el crecimiento español no se basa en las ayudas
José María Aznar salió ayer en defensa de la posición económica española en el marco europeo, al replicar al primer ministro alemán, Gerhard Schroeder, quien denunció la situación privilegiada de España y atribuyó el cumplimiento del pacto de estabilidad a los fondos europeos, nutridos en buena parte con dinero germano. El jefe del Gobierno español intentó restar importancia a las declaraciones del canciller alemán con la disculpa de que hizo estas manifestaciones «en el calor» de un debate parlamentario. «El crecimiento español responde a distintas causas», dijo Aznar en la rueda de prensa que compartió con Jacques Chirac en Quintos de Mora. «Si el crecimiento español respondiera estrictamente a los fondos europeos no sería explicable por qué yo recibí un país con un 7% de déficit, que no crecía y con la Seguridad Social quebrada», apuntó para rechazar las quejas de Schroeder. Aznar atribuyó el cumplimiento de los requisitos del pacto de estabilidad a la política económica aplicada por sus Gobiernos. «España ha hecho sus deberes», afirmó y explicó que «tenemos equilibrio presupuestario, hemos hecho reformas, liberalizamos la economía y España es un país que crece». Sin embargo, el presidente español quitó hierro a la polémica provocada por su colega alemán, aseguró que no concede «mayor importancia» a sus declaraciones por haber sido hechas en el «calor del debate parlamentario». «No le doy mayor trascendencia ni importancia», afirmó. Imponer sanciones El jefe del ejecutivo español se mostró firme partidario de que la Comisión Europea «asuma su responsabilidad», y ejerza las competencias que le corresponden para el control del cumplimiento del Pacto de Estabilidad por parte de todos los países de la UE que forman parte de la Unión Monetaria. «El Pacto de Estabilidad -dijo- es fundamental para la credibilidad del euro» y añadió que cuando Europa tiene un problema de crecimiento no sería bueno que, además, tuviera otro de credibilidad por incumplimiento de los requisitos impuestos a los países que forman parte del área del euro.