Diario de León

En el tumulto resultó herido leve el comisario jefe de la Policía Nacional de Málaga, Florentino Villabona

Centenares de vecinos increparon y lanzaron objetos al presunto asesino

El sospechoso abandonó su casa a bordo de un coche escoltado por tres furgonetas policiales

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Concha Montes - málaga
León

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La detención en Alhaurín el Grande de Tom Alexander King provocó gran indignación en este municipio y en el cercano Coín, donde residía Sonia Carabantes con su familia hasta que la mataron. Durante la tarde de ayer fueron muchos los vecinos de la zona que, indignados, se agolparon ante la vivienda donde vivía el presunto asesino. La tensión creció a medida que llegaban las noticias -al principio confusas- que apuntaban a que el sospechoso habría confesado su participación en el crimen. Algunos no pudieron contener la rabia y, furiosos, intentaron tomarse la justicia por su mano. Poco después de las 17.30 horas, la policía concluyó el registro que realizó en el domicilio del británico y los agentes, cargados con ocho bolsas y una caja en la que transportaban material incautado, abandonaron el inmueble en compañía del detenido. Varios centenares de vecinos, concentrados ante la casa, increparon con gritos de «asesino, asesino» al presunto criminal, que vestía pantalones cortos y zapatillas deportivas, y que escondía su rostro bajo una cazadora de tela vaquera. Abandonó el lugar a bordo de un coche y escoltado por otros automóviles y tres furgonetas policiales. Cada vez que un vehículo se aproximó a los concentrados, éstos se abalanzaron contra él y dieron rienda suelta a su furia con el lanzamiento de objetos, en un intento por alcanzar al detenido. Con ello sólo consiguieron herir al comisario jefe de la Policía Nacional de Málaga, Florentino Villabona, que recibió un golpe en la cabeza que le provocó una herida por la que tuvo que ser ingresado en el centro de salud de la localidad, donde recibió varios puntos de sutura. Alivio Los familiares de Sonia Carabantes recibieron aliviados, en su domicilio de Coín, la noticia de la confesión de Tom Alexander King. El abogado de la familia, José María Garzón, aseguró que la familia permaneció durante todo el día expectante, «a la espera» de que las diligencias practicadas por la policía aclarasen la relación del detenido con la muerte de la joven. El letrado apuntó que los expertos en homicidios de la Guardia Civil y de la policía seguían desde hace tiempo la pista de este sospechoso, e indicó que los allegados de Sonia mostraron «cierto alivio» tras conocer su arresto. De forma inmediata, dirigieron una petición al Juzgado de Instrucción número 1 de Coín, que lleva el caso, para quese les comunique «todo lo que hay». El representante legal destacó que el trabajo realizado ayer por la policía «no es algo que salta de la noche a la mañana». Aclaró que los especialistas analizaban desde hace tiempo todos las pistas que conducían a esta persona, y que constituían «la línea de investigación que se estaba llevando a cabo».

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