Los sindicatos de la Ertzainza exigen la dimisión de Balza

Alrededor de un centenar de agentes de la Policía Autónoma Vasca se concentraron ayer ante la sede del Ejecutivo vasco en Vitoria para demandar una mejora en las medidas de seguridad en las que desempeñan su trabajo. En el transcurso del acto, en el que se dieron cita representantes de la totalidad de sindicatos con representación en la Ertzaintza, los agentes recordaron a sus dos compañeros heridos en atentado el pasado domingo en el puerto alavés de Herrera y exigieron medidas que contribuyan a mejorar su seguridad. En un comunicado leído por el representante de ELA, Xabier Pérez, los ertainas reconocen que «nos sentimos y estamos solos» ante la «causa común y oídos sordos» de «todos los partidos políticos, tanto del Gobierno como de la oposición» a sus reivindicaciones, pese a lo que se comprometen a seguir siendo «los artífices del mantenimiento y funcionamiento» del cuerpo. «Resulta inaceptable que los erzainas pongamos en peligro nuestra integridad física a la hora de desempeñar la actividad profesional por la falta de previsión, medios y estrategias», denunciaron los sindicatos, que acusaron al consejero de Interior, Javier Balza de «restringir» la puesta en marcha de medidas adoptadas en la denominada mesa de Arkaute y de no atender sus demandas. Tras constatar que el consejero de Interior y su equipo «se han mostrado incapaces» de solucionar los problemas del cuerpo y han recurrido a la «mentira» sobre su situación, ELA, CC.?OO., UGT, ERNE y SIPE exigieron la «dimisión» de Javier Balza, por lo que convocaron una nueva concentración de protesta que tendrá lugar el viernes 26 de septiembre ante el Parlamento, fecha en la que tendrá lugar el debate parlamentario en el que el lendakari presentará su plan soberanista. Manifestación proetarra Mientras tanto, agentes de la Ertzaintza disolvieron ayer al mediodía a unas cien personas que se concentraron en Bilbao en homenaje al presunto activista de ETA Arkaitz Otazua, que falleció tras participar en el tiroteo con la patrulla de la Policía Autónoma en el Puerto alavés de Herrera. Sobre las doce y media del mediodía, comenzaron a concentrarse en la Plaza Circular de Bilbao decenas de personas vigiladas por un amplio dispositivo policial con una pancarta en la que se podía leer «Agur eta ohore. Gudari gaztea» (Saludos y honra. Joven soldado). En ese momento, el mando de la Ertzaintza encargado de la operación, que en todo momento se mantuvo a cara descubierta frente a las personas congregadas, les comunicó a través de un altavoz que la manifestación era ilegal al no haber sido comunicada al Departamento de Interior. Tras esto, los manifestantes intentaron iniciar la marcha, siendo interceptados por los agentes, que les impidieron el paso, lo que provocó momentos de tensión y algunos enfrentamientos verbales e incluso físicos con los allí congregados.