Gobierno y PSOE usan el caso King para acusarse de ineficacia judicial

Gobierno y PSOE aprovecharon la sesión de control en el Congreso para lanzarse mutuas acusaciones de ineficacia a costa de los crímenes presuntamente cometidos por Tony Alexander King. El por-tavoz socialista, Jesús Caldera, aprovechó la batería de pre-guntas dirigidas al ministro de Justicia, José María Michavila, para exigir responsabilidades al Gobierno por lo ocurrido. Caldera aseguró que «se ha producido un fallo generalizado del aparato de seguirdad y del judicial», dado que la policía británica «alertó» a la españo-la, y sin embargo el Gobierno sólo se ha fijado «en una pieza, la que les molesta: el jurado». La referencia de Caldera a este caso, que no estaba en la pre-gunta prevista en la sesión de control, provocó un escándalo en los bancos populares. «Al-guna responsabilidad tendrán ustedes, algo tendrán que decir, que explicar», dijo Caldera, que insistió en que la responsabilidad de la policía democrática es «prevenir los delitos». El portavoz socialista finalizó su intervención asegurando que en Andalucía, gobernada por el PSOE, es donde mejor funciona la Justicia en España. En su respuesta, el ministro aprovechó esta última referencia para arremeter contra los socialistas a costa del caso de Mijas y Coín. «Quizá no sea casualidad que el problema que usted ha señalado se produzca allí donde la Junta de Andalucía tiene las mismas competencias en materia de justicia que tiene el Ministerio de Justicia», ase-guró Michavila en medio de la bronca en las filas socialistas. «No creo que el mejor camino sea tirarse los trastos a la cabe-za -continuó Michavila-, sino trabajar juntos para que haya una justicia mejor». En otra pregunta, el diputado del PSOE Juan Fernando López Aguilar reprochó al Gobierno el «traer por los pelos el caso de Dolores Vázquez para intentar liquidar el jurado». La polémica sobre este asunto eclipsó el esperado enfrentamiento a costa del pacto de la Justicia. Michavila aseguró que son los socialistas «radicales» los que han impuesto sus tesis en el Partido Socialista para romper el pacto de la justicia por motivos puramente electorales.