Roca: «Es más fácil proclamar los derechos que hacerlos respetar»

El ponente constitucional y ex dirigente de CiU, Miquel Roca, se mostró ayer satisfecho ante la prensa por haber podido asistir al 25 aniversario de la aprobación de la Constitución en el Parador Nacional de Gredos, donde fue consensuada hace ahora un cuarto de siglo. Para Roca, la Carta Magna ha dado a España un amplio periodo de «normalidad institucional y democrática», aunque recordó que a los partidos les fue más fácil «proclamar» los derechos de los españoles en La Transición que hacerlos respetar actualmente. «Es más fácil ganar la libertad que vivir en ella; es más fácil proclamar los derechos que respetarlos -reiteró ante los periodistas el ex dirigente nacionalista catalán-. Esta es una lección que hay que agotar en la práctica de cada día». Anasagasti ni contestó En cambio, en los actos conmemorativos de la Constitución celebrados ayer en Gredos, no hubo representación alguna de Izquierda Unida, a pesar de que el portavoz adjunto del grupo parlamentario, Luis Carlos Rejón, había confirmado su asistencia, ni del PNV, cuyo portavoz, Iñaki Anasagasti, no contestó siquiera a la invitación que le cursó el vicepresidente segundo del Gobierno, Javier Arenas. El numero tres del Ejecutivo, responsable de las celebraciones del 25 aniversario de la aprobación de la Carta Magna, quiso mezclar la generación política que protagonizó el cambio del 78 con la que ahora ocupa los bancos del Congreso y a tal fin invitó por carta a los parlamentarios de la legislatura constituyente y a los actuales portavoces y dirigentes políticos. El portavoz de los nacionalistas vascos recibió como todos la misiva, pero hizo caso omiso. Su ausencia fue especialmente lamentada por los ponentes, que recordaron cómo en los años de la transición el PNV colaboró activamente en la elaboración de la Constitución a pesar de que al final optara por la abstención. Algunos de ellos contrastaban aquellas discusiones, en las que las discrepancias se intentaban resolver con el diálogo, con el ambiente de crispación que ahora preside las confrontaciones en el Congreso.