Villar denuncia que empresarios vascos pagan el impuesto etarra

Los empresarios vascos y el Ejecutivo autonómico condenaron ayer el atentado terrorista que este domingo acabó con buena parte de la flota de la empresa de trasportes Olloquiegui, once de cuyos camiones fueron destruidos en la zona de espera del puesto fronterizo de Irán (Guipúzcoa). Condena que unieron a duras críticas al delegado del Gobierno en la comunidad, Enrique Villar, que aseguró que buena parte de quienes sufren el chantaje que ETA denomina 'impuesto revolucionario' pagan lo exigido. Según Villar, ETA habría remitido en las últimas semanas una nueva remesa de cartas en las que se exige a cerca de 200 empresarios el pago de cantidades económicas con las que financiar su acción terrorista, y aseguró, sin ofrecer más datos, que «mucha gente paga». Los empresarios acogieron con indisimulado malestar estas manifestaciones. Aunque ninguna organización empresarial vasca quiso hacer valoración pública sobre lo ocurrido, fuentes próximas a la patronal vizcaína Cebek criticaron el «exceso verbal» del delegado del Gobierno, a quien retaron a que «si tiene constancia y pruebas de que algún empresario paga, acuda al juzgado y denuncie el hecho poLos empresarios vascos y el Ejecutivo autonómico condenaron hoy el atentado terrorista que este domingo acabó con buena parte de la flota de la empresa de trasportes Olloquiegui, once de cuyos camiones fueron destruidos en la zona de espera del puesto fronterizo de Irán (Guipúzcoa). Condena que unieron a duras críticas al delegado del Gobierno en la comunidad, Enrique Villar, que aseguró que buena parte de quienes sufren el chantaje que ETA denomina impuesto revolucionario pagan lo exigido. Según Villar, ETA habría remitido en las últimas semanas una nueva remesa de cartas en las que se exige a cerca de 200 empresarios el pago de cantidades económicas con las que financiar su acción terrorista, y aseguró, sin ofrecer más datos, que «mucha gente paga». En las últimas semanas una nueva remesa de cartas en las que se exige a cerca de 200 empresarios el pago de cantidades económicas con las que financiar su acción terrorista, y aseguró, sin ofrecer más datos, que «mucha gente paga». Apoyo a los extorsionados Sin entrar en el fondo de la cuestión, el Círculo de Empresarios Vascos expresó su apoyo y solidaridad a todos los empresarios «presionados y chantajeados por ETA y por quienes alientan y secundan a ésta». El Gobierno vasco se sumó a las críticas a Enrique Villar. El consejero de Justicia, Joseba Akzarraga calificó de «temeridad» que se diga que los empresarios pagan «sobre todo si no se tiene datos». Azkarraga expresó su deseo de que ETA desaparezca «cuanto antes» y el pueblo vasco pueda «ir levantando cabeza y estar en una situación mejor que la actual». Tras condenar el último atentado etarra, el consejero denunció a quienes «se empeñan en destruir el empleo» en Euskadi y advirtió de que «esa no es la forma ni de crear riqueza, ni de crear libertad para nuestro pueblo sino justamente la contraria». Los miembros del consorcio de seguros que inspeccionaron ayerlos camiones calcinados estimaron que los daños superan el millón de euros. La cifra se incrementará según la carga, características de los vehículos y de los seguros que tenían suscriptos. Juan José Ibarretxe rechazó «contundentemente» este atentado y aseguró que «estamos asqueados» de las acciones terroristas de ETA. En un mensaje a la banda, el 'lehendakari' señaló que «cada vez son más las personas que dentro del propio mundo de la izquierda abertzale rechazan los atentados de ETA, cada vez somos más los que militamos detrás de una frase que resumen perfectamente lo que queremos los vascos: 'ETA kampora' (ETA fuera), ETA sal de nuestras vidas de una vez y para siempre». El secretario general de ELA, José Elorrieta reconoció que el atentado de Irún es «la típica acción para presionar por el tema del 'impuesto revolucionario'» .