La protesta de 4.000 parameses lleva a Herrera a negociar las tarifas de riego

? El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, se reunió ayer con el presidente del Sindicato de Riego de la Comunidad de Regantes del Páramo Bajo de León y Zamora, Herminio Medina, para buscar una solución al problema de las tarifas de riego que la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) pretende imponerles y que éstos se niegan a pagar por considerarla excesiva. No se llegó a ningún acuerdo en concreto, pero los agricultores consiguieron, al menos, concertar para mañana otra reunión con Herrera para seguir negociando y encontrar una salida positiva para todos. La entrevista entre Medina y el presidente de la Junta, en la que estuvo presente el consejero de Agricultura, José Valín, se llevó a cabo en el castillo de Fuensaldaña, sede de las Cortes regionales, mientras en la calle cerca de 4.000 agricultores del Páramo se manifestaban de forma pacífica. Medina, tras reunirse con Herrera, se mostró relativamente satisfecho y esperanzado con la entrevista que se llevará a cabo mañana, pero anunció que si en ese encuentro no se llega a ningún acuerdo las movilizaciones continuarán, «porque con esas tarifas no podemos sobrevivir», aseguró. El representante de los regantes también confirmó que tanto Herrera como Valín le habían vuelto a proponer ciertas ventajas en caso de llevar a cabo una modernización de los regadíos. «Nosotros queremos modernizar nuestras infraestructuras, porque no podemos seguir regando en precario, pero si no somos capaces de hacer frente a estas tarifas, ¿cómo vamos a pensar en meternos en más obras? Pero que quede claro que nosotros queremos acometer también la modernización», comentó Medina. Los regantes se quejan de tener que asumir unas tarifas injustas que no les permitirían sobrevivir. Según señaló su presidente, se sienten engañados ya que cuando se optó por el trasvase del Esla en lugar del pantano de Omaña se les dijo que jamás pagarían más que el resto de las comunidades, y ahora resulta que no es así. Además aseguran que la obra se adjudicó en 48 millones de euros y finalmente costó 78 millones, una diferencia que también les pretenden endosar.