La policía busca entre las bandas a los asesinos del estudiante colombiano

El instituto Sant Josep de Calassanç de Barcelona vivió una jornada de duelo tras el apuñalamiento mortal el pasado martes por la tarde de Ronny Tapias, alumno de colombiano de 17 años de edad que repetía cuarto curso de ESO. La Policía cree que los autores del crimen pueden pertenecer a alguna banda juvenil organizada. Profesores, padres y alumnos del mencionado instituto se concentraron al mediodía en la confluencias de la calles Industria y Sant Quintín, lugar donde se produjo la agresión mortal. Este colectivo quiso dar, mediante la lectura de un comunicado, su pésame a la familia además de censurar la poca vigilancia que existe en el barrio. El comunicado señala que la muerte se debe «a la violencia social generalizada que hay en la ciudad de Barcelona y que es totalmente ajena a los centros de enseñanza». De este modo, se quiere resaltar que en el instituto se vive «un clima de convivencia pacífico y de trabajo». El asesinato de Ronny Tapias se produjo poco antes de las seis de la tarde del martes. El joven de 17 años fue apuñalado por un grupo de cinco «pandilleros» cuando se dirigía, junto a un amigo brasileño de 16 años, a hacer fotocopias a una papelería situada en las inmediaciones del centro escolar. El crimen se produjo con las calles repletas de alumnos que a esas horas salían del instituto. Numerosas personas fueron testigos de la agresión y de la huida de los agresores. La policía está investigando la posible relación de una banda juvenil organizada con el crimen. En este sentido, existe un informe redactado por la Guardia Urbana alertando sobre la actuación en algunos escenarios de la ciudad de una banda llamada «Latin Kings». Varios padres y alumnos del instituto manifestaron sus sospechas de que los agresores formaban parte de estas bandas de jóvenes de origen latinoamericano y estética rapera como los «Latin Kings» o «Los Nietas», que suelen reunirse en algunas plazas del barrio. Otros alumnos del instituto apuntaron que la banda de «Los Nietas», que actúan en la calle Lepanto, cercana al instituto Calassanç, suelen ir armados con navajas, cadenas y bates de béisbol. El padre de Reinaldo atribuyó ayer el asesinato de su hijo a una banda juvenil de lationamericanos recién llegados a la capital catalana a los que «no gusta que otros inmigrantes, como es el caso de mi familia, se hayan integrado tan bien» en el país.