El tribunal que investiga a Atutxa denuncia la presión del PNV en el caso

La Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco criticó ayer con dureza la concentración organizada este miércoles por PNV, EA e IU frente a la sede judicial en apoyo al presidente del Parlamento autónomo, Juan María Atutxa, el vicepresidente primero, Gorka Knörr, y la secretaria de la Cámara, Kontxi Bilbao, que se declararon como imputados por un presunto delito de desobediencia al incumplir la orden del Tribunal Supremo de disolución del grupo parlamentario Socialistas Abertzales. El Ejecutivo autonómico respondió de inmediato y su portavoz, Josu Jon Imaz, denunció que la única presión es el intento de «judicializar la vida política» por parte del Gobierno español. A través de un comunicado, la Sala de Gobierno del alto tribunal vasco afirmó que la presencia de los manifestantes que entonaron el himno del soldado vasco y lanzaron gritos a favor de la independencia durante las doce horas de declaración de los miembros del Parlamento vasco acusados de incumplir una orden del Supremo «ha producido el efecto de deslegitimar, ante la opinión pública, al Poder Judicial». El presidente de la Sala de lo Social del alto tribunal vasco, Manuel Díaz de Rábago, disintió del contenido y anunció su intención de redactar en un plazo de 72 horas una explicación a sus discrepancias.