Fraga apuesta por pegar un cañonazo a un petrolero que se acerca a Galicia
El presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, aseguró este sábado que «es suficiente» el envío del patrullero Atalaya al encuentro del petrolero ruso Geroi Sevastopolya, para evitar que el buque se acerque a menos de 200 millas de las costas españolas. A juicio de Fraga, «sobra» con el dispositivo enviado al encuentro del buque, pero «si se ponen tontos se les pega un cañonazo, punto». La Xunta no quiere que la historia se repita y, con la experiencia adquirida de la catástrofe del Prestige, no bajará la guardia ante la llegada del petrolero ruso que este sábado pasó frente a las costas gallegas. En alta mar espera al petrolero el patrullero de la Armada con órdenes para evitar por todos los medios que el buque se acerque a menos de 200 millas del litoral español. Coincidiendo en día, el 13, pero un año y un mes después del S. O. S. del Prestige frente a la costa de Finisterre, las consellerías de Presidencia y de Pesca del gobierno gallego, bajo la dirección del presidente, Manuel Fraga, establecieron un gabinete de vigilancia que controlará en todo momento la ruta del barco, que transporta en sus bodegas 50.000 toneladas de fuel pesado y que carece de doble casco. Esta medida se suma a la adoptada por el Gobierno, que ha enviado a la zona al patrullero Atalaya un avión de la Armada y un barco de Salvamento Marítimo. El capitán el Geroi Sevastopolya envió este sábado un mensaje al Centro Nacional de Coordinación de Salvamento en el que informaba que el buque se iba a mantener fuera del límite de las 200 millas. Está previsto que el petrolero salga de zona de competencia española sobre las 20.30 horas de la tarde de hoy. A partir de ese momento será la Armada portuguesa la que se encargue de la vigilancia del buque.