El triángulo industrial del entorno de la capital triplica el número de empleados pese a que el valor de la producción es similar
El eje Valladolid-Burgos genera el triple de riqueza que el de León-Salamanca
El CES pronostica consecuencias feroces si la Junta no dispersa la concentración del sector
El Consejo Económico y Social de Castilla y León ha sido contundente en su último tirón de orejas a la Junta. Las repercusiones sobre las expectativas económicas generadas por la ampliación de la Unión Europea serán feroces en los diferentes sectores productivos de la comunidad si no se equilibra el sector industrial, y para ello será necesario impulsar áreas fuera del eje Valladolid-Palencia-Burgos, viene a concluir un profundo informe elaborado a iniciativa propia por este órgano. El estudio argumenta que en este entorno -las tres provincias acaparan el 60% del suelo industrial- se produce el mayor volumen de flujos comerciales y que no habrá desarrollo si la Administración autonómica no apoya a las industrias ubicadas en otras provincias, buscando una mayor simetría en la balanza comercial interprovincial. Tan tajante como la determinación del CES es el resultado de una exhaustiva comparación de los datos macroeconíomicos relativos a la industria en estos dos ejes. La estadística del INE sobre empleo revela que en las tres provincias del Oeste (León, Zamora y Salamanca) el sector industrial, excluyendo la construcción, da trabajo a una de cada nueve activos (12,5%), mientras que en el entorno de la capital este sector productivo emplea a uno de cada tres trabajadores (31,33%). El valor de los bienes y servicios industriales una vez deducido el coste de los bienes intermedios utilizados en el proceso de producción, es decir, el Valor Añadido Bruto, es otra variable objetiva para medir las distancias en el desarrollo industrial de dos zonas. El Anuario Estadístico de Castilla y León, elaborado por la Junta, pone de relieve que el VAB difiere mucho entre ambos ejes. El cordón industrial desarrollado entre Valladolid, Palencia y Burgos generó también tres veces más riqueza que el de León: 3.960 millones de euros frente a 1.153. Pese a ello, el Producto Interior Bruto aportado por cada área industrial -al valor añadido se le suman los impuestos netos de la importación y el IVA- es similar: las provincias del Oeste sumaron casi 14.000 millones de euros frente a los 17.000 millones registrados en Burgos, Valladolid y Palencia. El año pasado, en este último territorio operaban un total de 6.242 industrias. En las provincias de León, Zamora y Salamanca, el número de actividades industriales se situó en 7.086, lo que quiere decir que existe una mayor atomización del sector. A final del ejercicio, y según la estadística de sociedades mercantiles correspondiente al 2002, en León se habían creado 845 empresas, 998 en Valladolid, 259 en Zamora, 562 en Salamanca, 474 en Burgos y 219 en Palencia. Es, con mucho, Valladolid la provincia en donde más se invirtió (383.271.000 euros), a la que siguieron León (75.155.000 euros), Burgos (54.898.000 euros), Salamanca (47.646.000), Palencia (19.466.000 euros) y, por último, Zamora (17.928.000 euros).