Folgado aplaza la definición de la reserva estratégica hasta después de las elecciones

Como ya era previsible, la propuesta sobre las minas y empleos que sobrevivirán en España -que se debe enviar a Bruselas antes de julio- no quedará cerrada hasta después de la cita electoral de marzo, tal y como reconoció José Folgado en la reunión de la Comisión de Seguimiento del plan del carbón celebrada en la tarde del lunes. El secretario de Estado de Energía confesó que el Gobierno no estará en condiciones de llegar a un acuerdo con todo el sector antes de esa fecha, por lo que será un Gobierno en funciones y un nuevo Ejecutivo quienes finiquiten la propuesta española. Esta situación ha provocado malestar entre los sindicatos, que desde hace semanas venían exigiendo al Ejecutivo que adelantara las negociaciones con todo el sector. Por el momento, la primera reunión convocada a tal efecto no se celebrará hasta el día 12 de enero. Las dudas sobre el futuro son muchas. Y el calendario, reducido. También en marzo el Gobierno tiene previsto aprobar el esperado plan de asignaciones de emisiones contaminantes para intentar adaptarse al Protocolo de Kioto, que conllevará cuantiosas inversiones medioambientales para las eléctricas y que podría afectar directamente a la minería. De hecho, sin este documento, es difícil calibrar la magnitud del cupo español en la reserva estratégica Kioto ha revolucionado el panorama energético y ha creado tensiones entre las compañías eléctricas, hasta tal punto que Folgado insinuó ayer que podría aplazar la aprobación del citado plan. Muchas dudas para el sector «que Folgado no resuelve». El secretario de Estado reconoció también que la producción actual (12,7 millones de toneladas, cinco en León) «no está en el margen de lo posible» de cara a la reserva estratégica, es decir, que se prevé una reducción de unidades de producción en los próximos años. Incertidumbre El secretario de Estado de Energía combina en las últimas semanas la incertidumbre que transmite en las reuniones con los sindicatos con los llamamientos a la calma que realiza en sus apariciones ante los medios. La pasada semana, Folgado aseguró en León el papel estratégico del carbón y aseguró que la minería no iba a pagar la factura del Protocolo de Kioto. «La actitud de Folgado sólo produce un enquistamiento de la situación», apuntó el líder regional de la Federación de Industrias Afines (FIA) de UGT, Manuel López. Esta formación no descarta la convocatoria de movilizaciones generales si el Ejecutivo no ofrece respuestas. Por lo demás, la reunión de la comisión de seguimiento del Plan del carbón del pasado lunes no alteró la línea de desencuentros entre Folgado y los sindicatos. El secretario de Estado presentó la actualización de los datos del plan e hizo una interpretación del grado de cumplimiento que no coincidió con las centrales sindicales. En cuanto a la posible negociación de un nuevo plan del carbón -el actual expira en 2005- que exige todo el sector, tampoco hubo avances. «La actitud de Folgado sólo produce un enquistamiento de la situación» MANUEL LÓPEZ Secretario regional de FIA-UGT