Las ocho canteras de pizarra emplean a casi 800 trabajadores, muchos más que habitantes hay censados en el pueblo
La Cabrera pide la construcción inmediata de una carretera La Baña-Zamora
Desde hace doce años existe una pista practicable en todoterreno hasta el límite con Zamora
«A ver si ahora La Baña va a ser un cruce de cuatro carreteras, como decían en el barrio de San Pedro». Las palabras de Carrilano suenan a sentencia. Este bañés emigró a Suiza sin nada debajo el brazo, ni papeles para entrar de legal, cansado de cruzar a pie las montañas de La Cabrera hacia Galicia y Zamora para hacer peonadas en las obras hidráulicas. Retornó, puso fonda en su pueblo y fue testigo y protagonista de la ejecución de la traida de aguas que bebe en la cristalina fuente de la Fervienza. También vio bajar las pioneras carrocetas cargadas de pizarra a granel desde Manada Vieja y Matacouta y al señor Bautista Pérez al mando de la primera pala mecánica para arrancar el «oro negro». Ahora, ya en el retiro, acaricia la idea de que la pista que hace doce años abrió la junta vecinal entre León y Zamora, se convierta en una carretera como la que uneTruchillas con Escuredo, también en tierras zamoranas, con la diferencia de que la que ahora reclaman sitúa a La Cabrera a 42 kilómetros de la autovía de las Rías Bajas, a su paso por Puebla de Sanabria. Ocho kilómetros de pista se encaraman por la montaña desde La Baña hasta el límite con la provincia de Zamora. Desde aquí hasta San Ciprián no hay nada, aunque algunos obreros se atreven a cruzar el monte con el todoterreno cuando no hay nieve. La pista leonesa fue abierta hace doce años por la junta vecinal, con la ayuda de las empresas pizarreras. Pero el tramo hasta San Ciprián está sin abrir aunque «hay trabajadores que lo utilizan durante el buen tiempo con un todoterreno», precisa el alcalde de Encinedo. No se ha cumplido el compromiso de la anterior corporación provincial de Zamora para presupuestar el proyecto de la pista. El portavoz del grupo socialista en esta Diputación, Tomás Omaña, señaló que preparan una moción para exigir que se cumpla el compromiso. Una campaña del sindicato de Metal, Construcción y Afines de UGT de Zamora, realizada hace dos años, logró reunir más de 600 firmas en la comarca de Sanabria para que se hiciera la carretera entre San Ciprián y La Baña. «El progreso de Sanabria pasa por la construcción de esta carretera», explica José Antonio Villarino, principal impulsor de la reivindicación. Los empresarios que explotan las ocho canteras de La Baña -la quinta parte de Castilla y León- claman por esta nueva vía de comunicación. «En media hora nos ponemos en una autovía y también vendría mano de obra de la provincia de Zamora, que necesitamos», precisa uno de ellos, que prefiere el anonimato. Desde Zamora se ve una oportunidad de crear riqueza con el empleo que ofrecen las empresas pizarreras. «Los jóvenes se van de Sanabria porque no encuentran trabajo y con el acceso las pizarreras se han comprometido a crear otros 250 puestos de trabajo», explica el sindicalista. «Este hombre no quería jubilarse sin ver la carretera hecha», indica el alcalde de Encinedo, Ramiro Arredondas, quien ha participado en las reuniones entre empresarios, políticos y sindicalistas para pedir a la Diputación de Zamora que mejore el trazado de la pista en la vertiente de esta provincia. Villarino se ha jubilado pero no renuncia a ver cumplido el proyeccto. Después de patearse la comarca durante unas elecciones sindicales tomó la determinación de recoger firmas para presionar a los responsables políticos, pero al cambiar la presidencia de la institución zamorana no se ha conseguido ninguna nueva reunión que desvele el compromiso económico de Zamora con la pista. «El significado de esa carretera es más importante de lo que parece», precisa Villarino. Hay más obreros y obreras -en la pizarra el empleo de la mujer ronda el 40%- que habitantes censados en La Baña, 599. Las empresas El Carmen, Celtas, Begoña, La Baña, Gonta, Picón, Matacouta, Manada Vieja (Couso Cotado) dan trabajo a cerca de 800 personas y se calcula que casi el 60% viajan a diario desde El Barco de Valdeorras, La Rúa, Ponferrada, Puente de Domingo Flórez, Astorga, La Bañeza, Castrocontrigo, Puente de Sanabria... además de los pueblos de La Cabrera. Si el arreglo de la carretera de Castroncontrigo a La Baña ha sido recibido «casi como un milagro» porque tuvo que ser transferida a la Junta para conseguir dinero, ahora se clama también por el ensanchamiento de la carretera que comunica con Galicia a través del puerto de Fonte da Cova. Quitar la nieve para trabajar Los empresarios alquilan una máquina quitanieves a un vecino de Puente de Domingo Flórez para abrir la carretera de La Cueva, como lo llaman en La Baña, a las siete de la mañana, cuando pasan la mayoría de los todoterrenos en los que se desplazan los trabajadores. «La de la Diputación provincial de León sí viene, pero llega a las once o las doce de la mañana. No podemos esperar hasta esa hora», subraya Juan Bautista Pérez. «Las comunicaciones son vitales para las empresas y para los vecinos; en un lugar tan alejado de las ciudades y en el tiempo que vivimos no podemos estar sin carreteras». Pizarras Matacouta emplea a 130-140 trabajadores. Su dueño señala que el 80% son gallegos; además, fleta cada mañana un microbús desde Astorga con 20 plazas que se ocupan en el recorrido por La Bañeza y Castrocontrigo. En las empresas El Carmen y La Baña, dos de las que cuentan con más trabajadores en su plantilla, tienen comedores de empresa para los trabajadores de las naves de elaboración y en los tres bares del pueblo se sirven una media de 70 comidas diarias. Necesidad de mano de obra «Estamos haciendo una nave nueva y necesitamos 50 personas, pero la gente parece que no quiere trabajar porque aquí se gana un buen sueldo y, sin embargo, es difícil encontrar mano de obra», explica Luis Martínez, de Pizarras La Baña. El sueldo mensual de un labrador ronda los 2.500 euros. Los salarios más bajos, de pinche y embalador, rondan los 1.000 euros al mes sin contar con las dos horas extraordinarias que realizan a diario casi la totalidad de los trabajadores. «Nosotros tenemos 180 empleados -agrega Martínez- y de sólo 80 son de La Baña, los otros vienen de El Barco, Ponferrada, Zamora...» Una familia de Astorga ha conseguido alquilar una casa en La Baña, pero no es fácil encontrar vivienda en el pueblo. «No se han hecho viviendas sociales y tenemos pocos servicios, los jóvenes que se casan y quieren trabajar los dos no tienen con quien dejar los hijos... De seguir La Baña y Quintanilla se irán despoblando cada vez más», apunta Juan Bautista Pérez. Encinedo cuenta con 1.006 habitantes y todos sus pueblos pierden vecinos excepto La Baña.