El pueblo pierde el primer recurso para evitar que su vieja majada de verano se convierta en cantera

El único conflicto que la Junta Vecinal mantiene con la explotación de pizarras en sus montes se debe al intento de ocupación «de una tierra que es muy sagrada para el pueblo». El paraje de las Bostargas es la antigua majada de verano del abundante ganado vacuno que había en La Baña y la cantera de Manada Vieja echó mano de un permiso de la junta vecinal de 1981 para iniciar un nuevo frente de explotación en este terreno hace dos años. Los vecinos paralizaron la cantera e iniciaron un proceso judicial contra la Junta de Castilla y León -por autorizar la ocupación- pero no han conseguido que el tribunal contencioso administrativo les dé la razón. Una sentencia del 11 de diciembre declara válida la autorización y ahora la Junta Vecinal estudia otras posibilidades de defender sus terrenos. «Nosotros queremos guardar eso ahí para el futuro, porque ahora las pizarras van bien, pero el día de mañana no sabemos qué puede pasar», indica el pedáneo, José Méndez. Se da la circunstancia de que esta explotación carece de naves de elaboración en el término de La Baña. Desde que fue adquirida la cantera por la empresa gallega Couso Cotado se llevan los rachones a serrar y labrar en naves de la provincia de Orense. Según la Junta Vecinal, la empresa podría estar incumpliendo una de las condiciones que se exige en los permisos de ocupación: tener las naves de elaboración en el término de La Baña, ya que la actividad extractiva en sí misma genera muy pocos puestos de trabajo. Los vecinos se manifestaron hace dos años para para el intento de ampliación de la cantera.