Aznar se desmarca de la crisis alegando que no es «dirigente del PP»
La Xunta ofrece ahora apoyo psicológico a la joven de Toques
La Consejería de Familia se ha puesto «a disposición» de Sandra, rechazada por sus vecinos
Sandra, ayer, en las inmediaciones de su casa
El Gobierno gallego ha dado un giro a su estrategia en relación con la joven vecina de Toques víctima de los abusos sexuales por los que ha sido condenado el alcalde del municipio, Jesús Ares. Manuel Fraga evitó ayer matizar sus controvertidas declaraciones iniciales sobre el caso, «no tengo ningún comentario más que hacer», pero mostró una actitud más prudente y sensible hacia la afectada, de la que dijo que «al parecer, tiene algún problema con los vecinos». Consciente del riesgo de exclusión de la víctima en un concello de 1.500 habitantes, la Xunta ha concretado la nueva estrategia contactando con la joven. La conselleira de Familia, Pilar Rojo, se ha puesto «a su disposición». Fraga apuntó que siempre está de acuerdo con la conselleira, quien señaló que el presidente «no estuvo afortunado», y pidió comprensión y apeló al «buen sentido del pueblo gallego, por la buena fe con la que procedemos en todo momento». El jefe del Ejecutivo aseguró que el caso está zanjado para el PP, después de ejecutar la suspensión de militancia y la apertura del expediente para la expulsión del alcalde y de los cinco ediles rebeldes que desobedecieron al partido para mantener al regidor en el cargo. Fraga arguyó que el PP «hizo lo que pudo. Habrá que crear una gestora, como en Sada», donde el PP inició hace diez días el proceso para expulsar al alcalde y siete ediles. Fraga quitó hierro a la proliferación de casos de indisciplina en el PP (Toques y Sada se suman a los de Carral y Ponteareas), que achacó a la coyuntura electoral: «En tiempos de elecciones, siempre se producen incidentes». Descartó que la gestión del caso Toques le haya llevado a meditar el relevo de Palmou como número dos del PP. Desmarque de Aznar El presidente del Gobierno, José María Aznar, evitó ayer implicarse en el caso Toques y echó balones fuera sobre su resolución política por parte del PP gallego. «Yo no soy dirigente del PP en estos momentos, soy presidente del Gobierno. Comprendo su interés en hablar de estas cuestiones, pero no tengo nada que decir», comentó Aznar a los periodistas. El presidente del PP salió del paso dando por buena la actuación en el caso: «Supongo que se han tomado las decisiones correctas, por lo que yo he visto».