De Francisco: «El pacto en León es hoy más fuerte que ayer, pero menos que mañana»
Algunas voces apuntaban que la situación política que se vive en Villaquilambre podría repercutir directamente en el pacto que mantienen PSOE y UPL en el Ayuntamiento de León. Tanto el teniente alcalde, José María Rodríguez de Francisco (UPL), como el alcalde, Francisco Fernández (PSOE), negaron ayer verse afectados. «El pacto de León es hoy mucho más fuerte que ayer, pero menos que mañana», declaró de Francisco. En este sentido, también se manifestó el alcalde de la ciudad, quien añadió que en el equipo de gobierno «hay una buena sintonía». En relación a la moción de censura presentada por los populares y los socialistas en el Ayuntamiento de Villaquilambre el teniente alcalde de León puntualizó que «obedece a una conspiración para debilitar el gobierno» de la capital. A esto añadió que los hilos de este entramado político estaban movidos directamente por el presidente provincial del PP, José María López Benito, y por el propio presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. «El PP puede estar seguro de que no nos va a debilitar», apostilló de Francisco en relación al pacto de León. Francisco Fernández explicó que como «disciplinado» acataba la orden tomada por su partido y que cuentan con todo su apoyo como secretario de la agrupación local. «No puedo decir más que estoy de acuerdo con ella», remarcó el alcalde. De Francisco calificó de «tránsfuga» al socialista de Villaquilambre, Miguel Hidalgo, y aseguró que la decisión tomada por el PSOE regional era «adecuada y lógica». A esto añadió que sin esta decisión no se respetaría la democracia, ya que la UPL ganó la alcaldía de Villaquilambre a través de los votos en las elecciones. Fernández aseguró: «Duermo de un tirón desde que me acuesto hasta que me levanto» y añadió que probablemente haya más gente preocupada por esta situación que él. El alcalde también negó cualquier tipo de manipulación o presión por parte de los leonesistas del Ayuntamiento de León: «No me siento presionado por la UPL, tenemos un proyecto de ciudad y, personalmente, a mí me preocupan más las vidrieras de la Catedral o el Mercado del Conde». Después de declarar ante los periodistas, ambos políticos sellaron de nuevo el pacto de León con un abrazo e, incluso, bromearon con besarse.