«No volveré a hablar con esa gente, pero alguien lo tendrá que hacer»

El secretario general de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Josep Lluis Carod-Rovira, reconoció este viernes que cometió un «error» al reunirse con ETA, pero rechazó asumir cualquier responsabilidad política distinta a la de su salida de la Generalitat. Carod-Rovira afirmó que «no volveré a hablar con esa gente», aunque añadió que «alguien lo tendrá que hacer». En su línea, aseguró que está dispuesto a aceptar el «linchamiento» al que dice estar sometido y a convertirse en «víctima política de ETA» si con «alguna palabra que haya pronunciado he conseguido salvar una sola vida». En una entrevista en Catalunya Radio, el político desveló que durante el encuentro que mantuvo con los terroristas en Perpinán sus interlocutores le dieron a firmar un documento, que rechazó rubricar porque «apoyaba todas las formas de lucha y los demócratas sólo tenemos una, que es la pacífica y democrática»También reiteró que «en ningún momento» planteó a ETA «que dejara de matar en Cataluña, y aún menos la perversión de que dejen de hacerlo en Cataluña y continúen en España». El líder de ERC pidió perdón a los votantes de su partido «desconcertados» y «decepcionados», a los que volvió a pedir que le apoyen el 14-M para conseguir una Cataluña «libre e independiente, alcanzada pacíficamente por las urnas». Insistió en que mantendrá su cargo de líder de la formación independentista y arremetió contra el PP, al que acusó de utilizarle como «cabeza de turco» para ir «contra ERC, contra el gobierno de izquierdas en Cataluña y contra el PSOE en España».