«Es el apoyo a la negociación política con ETA»

«Burdas manipulaciones». Así calificó ayer Mariano Rajoy las críticas a su partido por negarse a participar de la manifestación convocada en Barcelona contra ETA. Al candidato del PP a la presidencia del Gobierno no le sentaron bien las acusaciones sobre un supuesto intento de su partido de apropiarse de la lucha antiterrorista y mucho menos las de que en su ánimo no está tanto acabar con la banda criminal como acaparar votos. Como defensa, recordó que no sólo su formación se ha negado a participar de lo que Josep Piqué definió ayer como «pantomima», sino que también lo hicieron organizaciones como la Asociación de Víctimas del Terrorismo, la plataforma ¡Basta Ya! o los representantes del Foro de Ermua. Es decir, según sus palabras, «todos los que dan la cara día a día en el País Vasco por la libertad». El Partido Popular sostiene, tal y como dijo ayer Rajoy en León, que esta concentración de sindicatos y fuerzas políticas no se organizó para manifestar la repulsa hacia «los asesinos», sino para legitimar «una negociación política que ha hecho un señor (Josep Lluís Carod-Rovira) y que ha dado lugar a que ETA declare una tregua en un parte del territorio español».